ELA estará presente en Baiona el próximo 8 de abril

06/04/2017
El Comité Nacional de ELA y una nutrida representación de militantes del sindicato estarán presentes en los actos de Baiona del próximo 8 de abril La central abertzale respalda plenamente la filosofía de trabajo y la iniciativa de los Artesanos de la Paz que culminará el desarme definitivo de ETA

Una nutrida representación de ELA, con su dirección nacional a la cabeza, estará presente en la jornada de desarme del próximo 8 de abril en Baiona. El sindicato respalda plenamente la iniciativa promovida por los Artesanos de la Paz, entre los que se encuentra Txetx Etcheverry, responsable de la fundación Manu Robles-Arangiz en la capital labortana. Por esa razón, llama a su militancia y afiliación a participar en las mesas redondas que se celebrarán durante la mañana y en el acto multitudinario que tendrá lugar a las 3 de la tarde.

El desarme es un paso fundamental para la paz, un paso del todo necesario. Y ante la negativa reiterada de los estados francés y español para facilitarlo de manera ordenada, la iniciativa tomada por los Artesanos de la Paz es del todo legítima y deseable. ELA comparte además con estos promotores el deseo expresado repetidamente por ellos de que este paso pueda facilitar otros para consolidar la convivencia y la paz en nuestro pueblo.

En efecto, ELA considera que tenemos importantes cuestiones del pasado que abordar, como es la memoria de los padecimientos de muchos de nuestros conciudadanos por las innumerables vulneraciones de derechos humanos, así como el reconocimiento y la reparación de todas las víctimas, incluidas las que no tienen reconocimiento en el actual ordenamiento legal.

Por otra parte, es preciso terminar con la actual política penitenciaria, una política inhumana y contraria a los más elementales principios democráticos. Deben ser acercados los presos y presas, se debe excarcelar a las personas enfermas, y es preciso poner fin a la legislación de excepción que condena de por vida a muchos de los reclusos.

Expertos internacionales en resolución de conflictos han llamado la atención sobre la innovación y excepcionalidad que supone que personas de la sociedad civil, totalmente ajenas a la lucha armada, hayan asumido semejante responsabilidad. Ello constituye un meritorio compromiso ciudadano, que ELA apoya plenamente, y una auténtica vergüenza para unos estados que se dicen democráticos. Por ello, ELA exige a estos estados que renuncien a actuar contra las personas que facilitarán el desarme que los propios estados debían haber ordenado y facilitado.