ETXEKIDE: un claro ejemplo de precariedad

15/12/2015
ETXEKIDE podría ser uno de esos ejemplos históricos de precariedad y maltrato empresarial. Nos lo cuenta el responsable de ELA acompaña a los y las trabajadoras en las reivindicaciones y denuncias contra la empresa de ayuda a domicilio.
90 currelas, inmigrantes, dinero negro, pago aleatorio de todos los conceptos.
800 euros de salario al que está al 100% de la jornada (1850 horas).
Impagos, sin calendarios laborales, sin pagas extras.
Pero con sede y corbata en Gran Vía nº8 (Bilbo), y mucho anuncio en radio y prensa para llegar al público, dado que prestan servicios de ayuda a domicilio.
 
Hace dos años, ante esta situación, metimos preaviso de elecciones. La empresa no solamente juega sus bazas, y sacan 3 delegados bajo la sigla de Concesiones Obreras. Desde la votación oficialmente como sindicato desaparece, y quedan como son: ¡empresa!
 
En dos años la empresa no se ha sentado a hablar con nosotros, asesorados por CEBEK. Hemos insistido en inspección, PRECO... para hablar sin resultado.
 
EmpredImos trabajo con inspección, juzgado por mil temas y con varias victorias... y la más importante la que reconoce el convenio estatal de aplicacion, que supone un poco menos de miseria. La empresa reacciona y firma con CCOO un convenio de empresa que, entre otras cosas, una bajada de salario y aumento de jornada. Estuvimos a punto de regañarles en el juzgado, ya que algunas materias que cambiaron son ilegales.
 
Nos damos cuenta que los currelas ni cotizan correctamente.
 
Vamos al INSS (Instituto Nacional de la Seguridad Social), y le ponen a la empresa una sanción de 90.000 euros... que usan para meter un concurso de acreedores. Quieren cerrar la empresa, y ya tienen otro chiringito montado para empezar de cero.
 
Los currelas (más de media plantilla es de ELA) viven esto como una victoria para algunos y un relajo para otros, porque muchos viven con 400 euros, impagos, etc. etc.
 
Por todo ello, este martes, a las 13:30 en Gran Vía 8, vamos a concentrarnos y montar todo el ruido que podamos.