¡Para! cambiarlo todo
“Este año retomamos la ola del año pasado y damos un paso más allá convocando una huelga feminista de 24 horas -explica Leire Txakartegi, responsable del Área de Igualdad-, profundizamos en las reivindicaciones políticas y concretamos las reivindicaciones contra este sistema capitalista, heteropatriarcal y racista”. “Otra novedad importante es que se ha ampliado el eje de acción de esta huelga, incorporando a un colectivo tan vulnerable y tantas veces invisibilizado como el de las mujeres pensionistas”, añade.
Las reivindicaciones del 8M
-Empleo digno para las mujeres. Ni precariedad ni pobreza.
-Medidas estructurales contra la brecha existente en salarios y pensiones. Reivindicamos una pensión mínima de 1.080 euros. La brecha salarial en Euskal Herria es del 24%. La brecha en las pensiones llega al 44% .
-Medidas para una mejor conciliación entre la vida y el trabajo: jornadas laborables adecuadas, medidas a favor de la conciliación y de la corresponsabilidad de los cónyuges...
-Es imprescindible el reconocimiento político y social de las labores de cuidados para el sostenimiento de la vida.
*Que los hombres asuman la parte que les corresponde en las labores de cuidados.
*Garantizar el derecho a los cuidados de las personas en situación de dependencia a través de un sistema público universal, de calidad y gratuito.
-Un sistema de protección social adecuado: mejoras en las ayudas sociales y rentas garantizadas, y el derecho a la vivienda.
-Centros de trabajo sin violencia sexista. Centros de trabajo sin acoso sexual ni acoso contra el colectivo LGTBIQ+ . En contra de toda expresión machista que sufrimos todos los días.
-A favor de los derechos de todas las mujeres trabajadoras que se encuentran fuera del mercado laboral formal. Especialmente, a favor de los derechos de las mujeres migrantes.