COMECO
ELA logra la readmisión de 24 personas despedidas y aumenta la indemnización de las bajas voluntarias

La dirección de Comeco Gráfico Norte y ELA han alcanzado un acuerdo que pone fin al conflicto laboral por el despido colectivo que afectó a 57 personas del centro de Zamudio (rotativa del Grupo Vocento). Tras 156 jornadas de huelga, la dirección ha aceptado las reivindicaciones de ELA, asumiendo indemnizaciones muy superiores a las planteadas durante el periodo de consultas, y la readmisión de 24 personas despedidas. Además, mediante este acuerdo las salidas que se van a producir son de carácter voluntario evitando cualquier despido traumático. El acuerdo ha sido ratificado en la asamblea por la plantilla que estaba secundando la huelga.
El pasado 23 de diciembre Comeco despidió a 57 personas, tras el periodo de consultas del ERE, con la indemnización mínima legal. En dicho periodo, la dirección propuso una indemnización por despido improcedente más una cantidad de 5.000 euros. ELA, con mayoría en la mesa negociadora del ERE, rechazó la propuesta ya que no se acreditó la causa del ERE y porque la dirección no contemplaba la voluntariedad de los despidos.
ELA formalizó una demanda frente al conjunto del grupo Vocento del que forma parte la empresa, solicitando la nulidad de los despidos y denunciando la vulneración del derecho de huelga.
Después de 156 días de huelga y en vísperas de la celebración del juicio, la empresa ha aceptado mejorar significativamente todos los aspectos de su propuesta y que todas las posibles salidas sean voluntarias (la indemnización para estas personas será la la equivalente al despido improcedente más 10.000 euros). El acuerdo recoge una cláusula que garantiza el empleo hasta diciembre de 2028 y la renovación del convenio de empresa con una subida salarial del 6% para 2026 y 2027.
ELA destaca el compromiso de los y las afiliadas del sindicato que desde el primer momento decidieron luchar contra la pretensión de la empresa. El acuerdo mejora ostensiblemente las indemnizaciones y supone que ninguna persona trabajadora salga de la empresa en contra de su voluntad.