ELA denuncia que el salario mínimo pierde tres puntos de poder adquisitivo en 2022

De esta manera, la cuantía del SMI se mantiene muy por debajo de la de otros lugares de la Unión Europea como Alemania, Francia o Bélgica, que tienen unos salarios mínimos por encima de los 1.600 euros mensuales (en doce pagas), frente a los 1.167 euros al mes (también en doce mensualidades) en los que se va a situar en el Estado español.
ELA constata que el marco del diálogo social es un freno para los intereses de la clase trabajadora. Las subidas del SMI relevantes se han realizado al margen y pasando por encima del diálogo social. La reforma laboral tan insuficiente se justificó por la necesidad de alcanzar un acuerdo con la patronal. En este caso, CCOO y UGT se han mostrado dispuestos a acompañar al Gobierno y a la ministra Yolanda Díaz a la hora de imponer una pérdida de poder adquisitivo a los trabajadores y trabajadoras que perciben ingresos o prestaciones referenciadas al SMI.
ELA va a seguir valorando las medidas del gobierno al margen de quién las avale, y constata que, como ha ocurrido con las pensiones o con los ingresos de los trabajadores y trabajadoras del sector público, se está imponiendo una política de devaluación salarial.
La propaganda dice que el gobierno beneficia a las clases populares. Sus medidas, sin embargo, van en el sentido contrario.