ELA rechaza el acuerdo sobre el ERE del BBVA

“La plantilla lo ha visto muy claro desde el principio. Prueba de ello ha sido el éxito de las movilizaciones convocadas en las que exigíamos que no hubiera ningún despido forzoso y el mantenimiento del empleo. No se ha escuchado el clamor de la plantilla diciendo NO AL ERE. Las movilizaciones realizadas durante la vigencia del periodo de consultas no tenían el objetivo de mejorar las condiciones de salida y de rebajar el número de personas afectadas por el ERE; la plantilla muy mayoritariamente salió a la calle para decir que en el BBVA no sobra nadie”.
El sindicato defiende, asimismo, que había alternativas al ERE firmado la elaboración de un plan de prejubilaciones de calidad y el compromiso de nuevas contrataciones para aligerar las actuales cargas de trabajo pero la falta de beligerancia de quienes han firmado este acuerdo ha echado por tierra nuestras esperanzas de evitar este desaguisado que la plantilla va a pagar durante muchos años.
El ERE acordado prevé una reducción de plantilla de 1.235 personas (a falta de concretar la afectación en la CAPV y en Nafarroa), y otras muchas serán sometidas a movilidad geográfica.
Asimismo, ELA tampoco comparte los argumentos que están utilizando los firmantes del acuerdo para justificar su firma. No es cierto que se garantice la voluntariedad, dado que si no se cubren los cupos acordados por edades acudirán a los despidos forzosos. Las condiciones de salida para los que se van son manifiestamente mejorables, pero el panorama que se queda para la plantilla que va a permanecer en el banco no es nada halagüeño. En una plantilla ya de por sí mermada, en las que las cargas de trabajo están provocando un deterioro en la salud de una gran parte de quienes trabajan en esta entidad, la salida de un volumen importante de la plantilla no va a hacer más que agudizar esta situación y empeorar las condiciones de trabajo de los que no salen en el ERE.