La plantilla de Correos exige un cambio radical en sus condiciones laborales, en una jornada de huelga apoyada ELA, LAB y ESK

Estos sindicatos denuncian la pérdida de poder adquisitivo de la plantilla en los últimos años: 20% en el caso de los laborales y 25%, en los funcionarios. De hecho, los sueldos de Correos son tan bajos que superan por poco el salario mínimo interprofesional.
En cuanto a la salud laboral, los riesgos psicosociales están al orden del día. La plantilla se encuentra inmersa en un cambio de modelo de trabajo, pasando de ser un servicio público postal a ser una empresa de paquetera al uso, a costa de la salud de los/las trabajadores/as.
En cuanto a las enfermedades profesionales, denuncian queno se reconocen las recogidas en convenio.
La carga de trabajo es enorme porque la plantilla se ve obligada a asumir nuevas funciones mientras bajan las contrataciones. Los/as carteros/as tienen que mover un volumen de envíos cada vez más grande con el estrés y el riesgo para la salud que eso supone.
La eventualidad es muy alta y no es casualidad que la mayoría de los últimos accidentes graves o mortales sean del personal eventual. Correos presiona a los/las eventuales para cumplir unos objetivos difíciles de conseguir.
Así las cosas, ELA, LAB y ESK entienden que es necesario un cambio radical de la situación, que los contratos precarios y parciales no deben tener lugar en una empresa pública estatal y que el objetivo de Correos debe ser ofrecer un servicio público y de calidad y no tanto el beneficio económico.
Finalmente, anuncian más movilizaciones si la dirección no realiza un cambio de rumbo en la empresa.