Jornada de paro en protesta por el accidente mortal en Sigma Brakes de Tudela

Según los datos conocidos, el accidente ha sido comunicado en torno a las 03:15 horas a los servicios de emergencia, teniendo como resultado el fallecimiento de un trabajador de 35 años atrapado por una carretilla elevadora. En base a lo sucedido, cabría cuestionarse el cumplimiento de las obligaciones de la empresa en materia de formación, señalización y equipos de trabajo, así como de implantación de medidas de emergencia.
Ante esta situación, exigimos a la Inspección de Trabajo y al Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra la realización de una exhaustiva investigación de lo sucedido, en aras de determinar las causas del accidente, para evitar que vuelva a suceder y depurar posibles responsabilidades que pudieran existir.
Al respecto de este fatal accidente nos vemos obligados a manifestar que las malas condiciones de seguridad del conjunto de la plantilla de Sigma Brakes no son nuevas ni desconocidas.
Desde 2010 las representantes de este sindicato vienen denunciando reiteradamente ante Inspección de Trabajo y medios de comunicación los sucesivos incumplimientos de la empresa en materia de prevención de riesgos laborales y la falta de voluntad para mejorar las condiciones de trabajo en la planta. En ese sentido queremos recordar los dos incendios sucedidos a finales de 2015 en el plazo de 45 días, el segundo de los cuales obligó al desalojo de 60 personas; ante ello ELA denunció medidas de emergencia deficientes y situaciones de riesgo en la evacuación.
Cabría destacar que al respecto de dichas denuncias, a día de hoy hay procedimientos sancionadores en curso.
No podemos obviar que, en los últimos meses, la plantilla ha llevado a cabo movilizaciones para denunciar las malas condiciones de trabajo y la falta de voluntad de la empresa para mejorar su situación. A este respecto, nos parece fundamental destacar que las reivindicaciones en seguridad y salud laboral han sido un elemento central en las 16 jornadas de paros y huelga realizadas por la plantilla entre mayo y julio de este año en defensa de unas condiciones de trabajo dignas y de seguridad, y que lo siguen siendo a día de hoy.
Lo sucedido hoy es el más claro ejemplo de que tanto las muertes en el trabajo, como la siniestralidad laboral en su conjunto, no son más que la consecuencia directa de este modelo laboral que permite la extensión de las condiciones de trabajo precarias a lo largo y ancho de los centros de trabajo de nuestro territorio. Las empresas en general priorizan su beneficio económico inmediato frente a cualquier otro aspecto, poniendo en riesgo la salud y la vida del conjunto de los trabajadores y trabajadoras.
En ELA tenemos claro que la solución a esta lacra social pasa por garantizar el derecho de la clase trabajadora de Navarra a un empleo digno y de calidad, por lo que instamos al Gobierno de Navarra y a los organismos competentes a que, de una vez por todas, se destinen recursos suficientes para implantar medidas reales y eficaces que contribuyan a ello, así como a controlar los incumplimientos empresariales en materia de Seguridad y Salud Laboral.