Osakidetza cerrará los centros de salud de Bilbao las tardes de verano recortando aún más los servicios de salud

Desde el Sindicato ELA venimos denunciando desde hace años que la antención primaria sufre un fuerte incremento en su actividad. Sin embargo, no se le ha dotado de los medios adecuados, lo que ha tensionado la tarea de las personas que desarrollan su trabajo en ella. La falta de personal que alega Osakidetza no es una cuestión nueva, sin embargo: en vez de realizar una apuesta clara por la atención primaria, prefieren recortar derechos laborales, así como los derechos básicos de atención sanitaria de la ciudadanía.
Ahora, en la OSI Bilbao-Basurto, es el momento de recortar en el horario de atención presencial a la ciudadanía. En un comunicado, Osakidetza responsabiliza de esta situación a las y los profesionales que han decidido tomarse un más que merecido descanso en el periodo estival, para así, argumentar que entre esta situación, y la falta de personal, es necesario abrir los centros de salud únicamente hasta las 17 horas, en vez de hasta las 20.00 horas que lo hacían antes.
Si bien nos quieren hacer ver que se trata de una medida meramente organizativa, los recortes de Osakidetza cuando vienen, llegan para quedarse. No hay más que echar la mirada a esos últimos meses, y ver qué medidas se han adoptado también en atención primaria. En febrero de 2021 le tocó al PAC de Deusto, también perteneciente a la OSI Bilbao-Basurto.
Lo que realmente subyace es una política de ahorro, de falta de previsión y de falta de sustituciones del personal en periodo vacacional, cuestiones respecto de las cuales no existe ninguna voluntad de mejora ya que, verano tras verano, el único plan de Osakidetza es el de recortar servicios a la ciudadanía. Tras la situación de colapso que se vivió en la atención primaria el verano pasado, Osakidetza vuelve a poner encima de la mesa, exactamente, el mimo plan que puso en marcha entonces.
La realidad que vivimos en el Servicio Público Vasco de Salud es alarmante, ya que o bien no existe una verdadera voluntad política para desarrollar un servicio sanitario de calidad, o bien existe una política destinada a recortar este derecho fundamental y así privatizarlo.
Desde el Sindicato ELA nos oponemos a cualquier medida que conlleve la restricción de derechos a la ciudadanía, y exigimos que de una vez por toda Osakidetza haga una apuesta clara por la atención primaria, dotándola del presupuesto necesario, que pueda garantizar los medios personales y materiales necesarios para llevar a cabo este tipo de atención a la ciudadanía, y que sea una atención de calidad.