L & P Springs multinazionaleko enpresa komiteak zuzendaritzak Zamudioko egoitza itxi nahi duela salatu du

2005/11/22

L & P Springs multinazionaleko enpresa komiteak zuzendaritzak Zamudioko egoitza itxi nahi duela salatu du gaur Bilbon. Komiteak arazoaren aurrean duen jarrera aurkeztu du Bilbon.

La Multinacional Leggett & Pllatt (antigua Industrias Subiñas) tiene la intención de cerrar la planta de Zamudio.

Es una empresa que lleva trabajando en Zamudio desde 1959, por la cual han pasado muchos vecinos del pueblo. En la actualidad hay 52 trabajadores, la mayoría de la zona, de los cuales más del 50% llevan 30 años trabajando en la empresa. Nos dedicamos a la fabricación de muelles para colchonería y automoción, y también a la tapicería.

Tras la buena marcha de la planta la empresa decidió crear los centros de trabajo de Zaragoza y Martos (Jaén), aún así la central seguía siendo Zamudio. El 11 de Julio, sin nada que nos lo hiciese pensar, la empresa presentó un traslado de la totalidad de los trabajadores a las 2 plantas anteriormente citadas.

La situación económica no es mala, sino, todo lo contrario. El año 2004 la planta de Zamudio dio unos beneficios de 600.000 Euros y desde siempre ha sido una planta que ha dado beneficios, cosa que las otras plantas no pueden decir. La intención real de la empresa es el despido barato de los trabajadores y trabajadoras, y no el traslado como ponía en los papeles, de hecho este mismo año se ha firmado el Convenio Colectivo para la planta de Zamudio, y lo extraño es mientras la empresa se planteaba la situación actual, la negociación fue normal, hasta el punto de firmar un acuerdo bastante bueno para los trabajadores. Ahí se ve la mala fe que ha tenido la empresa durante todo el proceso.

La respuesta de la plantilla ha sido espectacular. Ha habido unión en todo momento y no ha habido ninguna fisura, algo, que la empresa no se esperaba. Ante esta respuesta por parte de la gente la empresa se ha dedicado a utilizar artimañas extorsionando y presionando psicológicamente a los trabajadores. Lo cual ha hecho que la unión sea todavía más fuerte.

Hemos hecho asambleas, pancartas, distribuido información tanto interna como externa (empresas del metal, por el pueblo, etc.). Ante esto seguimos comprobando la inmovilidad de la empresa y el talante poco negociador de la misma, con lo que nos vimos abocados a pedir el aplazamiento del traslado al Gobierno Vasco, el cual, nos dio la razón y lo atrasó 6 meses porque veía indicios de lo que nosotros veníamos reclamando, que era un cierre encubierto.

Después de esto nos tuvimos que ir a juicio, en el cual, la empresa mintió rastreramente sin ningún rubor. La celebración del juicio fue bastante extraña, como la decisión final de la Jueza. La jueza dictaminó a favor de la empresa, lo cual está recurrido ante el Tribunal Superior de Justicia del Gobierno Vasco.

A nuestro entender, y desde el respeto a la justicia, la sentencia es una aberración y atenta contra los intereses de la plantilla. Esto lo decimos puesto que la jueza en el dictamen no valora ninguno de los argumentos presentados por los trabajadores, ni la memoria explicativa, ni el resto de las pruebas, además hace unas valoraciones totalmente subjetivas como: "está convencida la juzgadora de que el anterior dueño pretende quedarse con la plantilla de trabajadores que la demandada pretende trasladar", lo cual nos parece bastante arriesgado por parte de la jueza, ya que es una suposición suya. Otra perla que nos deja es la siguiente "No se vislumbran indicios de que la mercantil pretendiera, un despido encubierto de los trabajadores, habiendo observado el procedimiento al efecto de forma escrupulosa y garantizando el empleo de todos los trabajadores afectados, nuevas viviendas y colegios para sus hijos, que es mucho más de lo que gran cantidad de familias en Euzkadi pueden llegar ni a soñar". Lo cual es lo mismo que pone en el Estatuto de los Trabajadores, o sea, que no nos está dando nada nuevo, pero se permite el lujo de valorar sin ningún reparo.

Como hemos dicho antes el recurso ante ésta sentencia está presentado, y desde aquí queremos denunciar, con que facilidad se permiten algunos jueces hacer juicios de valor, cuando el futuro de 52 familias está en juego.