Carta a San Valentín, patrón de nosotras, las enamoradas perfumeras y drogueras de Gipuzkoa

2007/02/15

Nosotras, trabajadoras del sector de Droguerías y Perfumerías guipuzcoano, nos dirigimos a tí para contarte nuestros más íntimos secretos y, de paso, ver si puedes echarnos una manita. Antes que nada, decirte que también nos dirigimos con anterioridad a los Reyes Magos con el mismo objetivo de recabar ayuda. A ver si entre todos y todas...

Bueno, vamos al grano. Verás: hasta el momento, nuestra pareja "sociolaboral" se llama Convenio y se apellida Estatal. En realidad, no fue una pareja libremente escogida, sino que más bien nos fue impuesta. Eramos muy jóvenes y como nos habían contado que formar pareja con un "Convenio" era algo guay, nos dejamos querer y aceptamos. Poco tiempo hizo falta para percatarnos de que el hecho de que nuestro amante se llamara "Convenio" no traía aparejada necesariamente bondad alguna. Por el contrario, pronto comenzó a hacernos sentir agraviadas y discriminadas respecto a mujeres guipuzcoanas emparejadas con otros "Convenios" de distintos y diversos apellidos, como "Provincial", "de Empresa", etc.,. ¡Nos corroía la envidia al ver cómo esas mujeres vivían mejor y con más tiempo libre!.

Así fue como surgieron, primero el desengaño y después el desamor.

Y un frío día otoñal, cuando menos lo esperábamos, apareció el Amor. Curiosamente, también se llamaba "Convenio", pero su apellido no era vulgar y denotaba un pasado noble: se apellidaba "De Bizkaia" y fue conocerle y quedarnos prendadas de él. No sólo era hermoso, sino que prometía procurarnos una vida más digna (200¬ más/mes) y trabajar bastante menos (36 horas menos). Llámanos egoístas e interesadas si quieres, pero... ¡es que habíamos pasado tantas estrecheces con el Sr. Estatal!.

Él también sintió una inmediata afinidad hacia nosotras, pero por desgracia ya estaba "ocupado". Sin embargo, nos comentó que tenía familia en Gipuzkoa y que ésta también estaba de muy buen ver. Entonces, cuando empezábamos a hacernos ilusiones, aparecieron unos oscuros personajes de siniestros nombres ( If, Basmo ....), diciendo a voz en grito que las plebeyas como nosotras sólo se podían relacionar con gente de su misma condición. O sea, con indivíduos "Estatales".

A pesar de todos los obstáculos, hemos decidido luchar por nuestro amor. De momento y para ir haciendo boca, hemos mandado al cuerno a "Estatal" y, claro está, seguimos empeñadas en conquistar a "De Gipuzkoa".

Pues eso, San Valentín: anda, mándanos a Cupido bien cargado de flechas y nosotras también nos "portaremos" a la hora de repartir embriagadores perfumes y maravillosas esencias.

Besos perfumados.

Mirari Irure Espín. Responsable de Comités de Empresa de Gipuzkoa del sector de Perfumerías y Droguería