Los y las trabajadoras de Banco Santander, Banco Popular y Banco Pastor contra la firma de un acuerdo que implante indiscriminadamente la jornada partida

El comunicado de los y las trabajadoras:
Mediante el presente comunicado, queremos poner de manifiesto que nos oponemos a la firma de un acuerdo de homologación de condiciones para las plantillas de Banco Santander, Banco Popular y Banco Pastor, que incluya, como condición sine qua non, la implantación indiscriminada de la jornada partida.
Tenemos muy claro cuáles son los límites, por lo que queremos comunicar nuestra más firme oposición a la imposición de una jornada partida que, de aceptarse hoy, en un futuro puede terminar aplicándose a la totalidad de los centros de trabajo, ya que ese es el camino iniciado por el banco y según sus propias manifestaciones en la mesa, por el que pretende seguir.
La implantación de una jornada partida hasta las 19:00 horas impide el control y la denuncia de las ilegales prolongaciones de jornada en el sector, penaliza a los miles de desplazados/as, a quienes se condena a destinar dos horas para comer. Todo ello saltándose el Convenio Colectivo del sector, que ya no es respetado ni por quien lo firmó.
Este cambio de horario, pese a lo que nos quieren contar, no pretende dar una atención personalizada, sino legalizar la situación de precariedad y de fraude que vienen sufriendo las plantillas del sector, realizando horas extras sin control, sin ser pagadas, ni cotizadas. De hecho, la empresa insiste, a pesar de estar condenada a ello por la Audiencia Nacional, en que no puede haber un sistema de control de horarios, ni de registro de la jornada laboral realizada, con lo que los trabajadores/as tendrían un horario “a su elección” entre las 8:30h y las 19h. Esto deja a la plantilla totalmente indefensa ante cualquier superior que les obligue a seguir trabajando hasta las 19h.
Instamos al resto de la representación legal de los trabajadores a no dejar desprotegido al personal, entrando en una negociación-trampa en la que se intercambie conciliación y salud por dinero, como si fueran "estampitas".
No vamos a renunciar a ningún medio para denunciar ante la empresa y la opinión pública, este intento de socavar derechos fundamentales, que tanto han costado conseguir. Si el banco sigue adelante, nos tendrá enfrente y tendrá que oírnos, quiera o no, tanto en la mesa como en la calle.