NEGOCIACIÓN COLECTIVA

ELA considera que el convenio del Comercio del Metal de Navarra es insuficiente y precariza a las nuevas contrataciones

16/11/2023
El acuerdo salarial no garantiza el poder adquisitivo y mantiene la jornada como una de las más altas de los convenios del comercio para otros tres años. La nueva regulación de categorías supone salarios más bajos para muchas de las nuevas contrataciones, y mantiene una categoría de aprendiz con el SMI

La patronal del sector y los sindicatos UGT y CCOO han firmado un preacuerdo para el convenio de Comercio de Metal de Navarra para 2023, 2014 y 2025. Se trata de un mal acuerdo, que deja fuera la mayoría de las reivindicaciones de ELA.

Han pactado una subida del 5% para este año y del 3% para 2024 y 2025. En el caso de que el IPC del periodo 2022-2024 se incremente por encima del 11%, se revisarán las tablas salariales a finales de 2025, pero nunca por encima del 13%. Teniendo en cuenta que sólo el primer año de referencia, el IPC ya subió un 6,4%, es muy probable que en este convenio vuelva a perderse poder adquisitivo nuevamente (ya se arrastraba un 3,6% de pérdida de 2022).

En cuanto a la jornada de trabajo, se mantiene la actual tres años más. Es el sector con la jornada más alta de todo el comercio, y en un momento en el que incluso se plantea la posibilidad de reducirla por ley, se seguirán trabajando 1.742 horas al año.
La nueva regulación partirá de la escala más baja de los salarios existentes para crear un sistema de entrada en el área de ventas. Según este sistema, se tardarán 3 años en alcanzar el que hoy es el salario habitual desde el primer día (unos 200 euros menos de salario al mes durante el primer año). Una planteamiento inexplicable teniendo en cuenta que se incorpora al convenio a propuesta de UGT y CCOO.

ELA ve totalmente injustificado que con ese nuevo sistema de categorías no se haya hecho desaparecer la única categoría con un salario por debajo del SMI.
El convenio sigue permitiendo el descuelgue de forma unilateral por parte de la empresa, ni la flexibilidad horaria, dos de las regulaciones que se impusieron tras la reforma laboral de 2012 del PP, y que se han dado por buenas tanto en la última reforma de 2021, como en la firma de este convenio.

Por todas estas cuestiones ELA no firmará el convenio, y califica esta negociación de nueva oportunidad perdida para mejorar las condiciones de trabajo del sector.