Una de cada cuatro personas jóvenes está sin empleo en Navarra

La ocupación se ha mantenido en los mismos niveles que el segundo trimestre. Las mujeres, han experimentado una bajada de 1.500 personas ocupadas, en consecuencia, la proporción de las mujeres empleadas cae al 45,9%. En cuanto a los sectores, se ha destruido empleo en construcción (7.100) y servicios (1.000); mientras que ha aumentado en agricultura (2.600) e industria (4.600). A pesar del aumento en la industria, seguimos estando 4.400 por debajo respecto al mismo trimestre del año pasado.
Si reparamos a la duración de los contratos, vemos que, en el último trimestre, las personas con contrato indefinido se han incrementado únicamente en 2.000. Además, hay que señalar que la tasa de temporalidad continúa siendo muy alta (21,1%). En comparación con la UE, nos encontramos el cuarto de la lista con mayor nivel de temporalidad, con siete puntos de diferencia respecto a la media de la UE. De modo que la temporalidad sigue siendo un problema estructural al que hacer frente.
En cuanto a las personas sin empleo, en el segundo trimestre ha habido 28.900 personas desempleadas, lo que supone un aumento de 800 respecto al trimestre anterior. Así, la tasa de desempleo aumenta ligeramente al 9%. Entre las personas desempleadas, vemos que hay más mujeres en esta situación. La tasa de mujeres desempleadas es muy superior, 10,7% respecto al 7,5% de los hombres.
Por otra parte, cabe recalcar que la tasa de desempleo en la Unión Europea sigue situándose muy por debajo (6%). Por último, señalar la situación precaria de las personas jóvenes. No solo se destruye empleo, sino que el desempleo también aumenta en 1.100 personas. Así la tasa de desempleo juvenil vuelve a cifras escandalosas, en Navarra una de cada cuatro personas jóvenes se encuentra en desempleo.
Nos encontramos en un contexto económico lleno de incertidumbre en el que el encarecimiento de la vida y la ofensiva contra los salarios es cada vez es más palpable. Un contexto que afecta también al empleo, en este momento, a pesar de los datos que ofrece la encuesta, la realidad es que miles de personas en Navarra se encuentran en una situación precaria, muchos con sueldos bajos, falta de seguridad en el trabajo y otros tantos con contratos eventuales. Por ello, ante este escenario, es necesario la organización y la movilización para luchar por una mejora de las condiciones materiales de la clase trabajadora.