El 2 de octubre, manifestaciones en las tres capitales vascas por un curso escolar presencial, seguro y consensuado

ELA, LAB, STEILAS, CCOO y UGT denuncian, asimismo, que a pesar del éxito de la huelga del 15 de septiembre y de las declaraciones posteriores del consejero de Educación, siguen sin tener ninguna noticia del Departamento para negociar los recursos adicionales, lo que les ratifica en las conclusiones que sacaron de las reuniones bilaterales celebradas en vísperas de la huelga con el nuevo consejero. “Por un lado, que seguimos sin planificación por parte del Departamento de Educación en cuanto a criterios comunes para garantizar la salud y la educación, medidas adicionales y previsiones de recursos, cuyos ejemplos más claros son las movilizaciones locales que se están llevando a cabo en las distintas escuelas. Y, por otro, que las posteriores declaraciones tanto del Consejero como del propio Lehendakari, así como la publicación tardía y abusiva de servicios mínimos excesivos, para, entre otros, el personal de limpieza, el personal educador de atención de necesidades especiales o las pequeñas escuelas infantiles, vulnerando el derecho a la huelga, solo fue un intento de invisibilización y desactivación de la movilización, la huelga y los problemas que se querían denunciar y destapar a través de ellas”.
En la rueda de prensa celebrada esta mañana, los sindicatos han resaltado, también, que en los últimos días se han llevado a cabo numerosas iniciativas para visibilizar los problemas de los diferentes centros educativos y colectivos, lo que ha forzado al Departamento de Educación a dar respuestas, aunque haya sido de manera limitada y parcial. Así las cosas, los sindicatos entienden que la movilización de todos los agentes educativos es la única manera de obligar al Departamento de Educación a poner sobre la mesa una planificación integral con criterios comunes y los recursos necesarios.
Las demandas de ELA, LAB, STEILAS, CCOO y UGT son claras: descenso de ratios y aumento de plantillas en todos los colectivos de trabajadoras y trabajadores, personal de limpieza, de cocina, educadoras de infantil 0-3, especialistas en atención de necesidades especiales, monitoras y monitores de comedor y transporte y profesorado; que los Equipamientos de Protección Individual EPIs recogidos en el protocolo estén en los centros escolares, especialmente en el caso de las especialistas y educadoras de necesidades educativas especiales que mantienen relaciones de proximidad; que las aulas tengan una distancia de 3m2 y 1,5 metros por persona, con un número entre 10 y 15 alumnos y alumnas, grupos más pequeños en el ciclo 0-3; aprovechar otros edificios y espacios naturales en las escuelas en las que no haya espacio; poner medidas y recursos para reducir la brecha social, pedagógica, tecnológica y de euskara; garantizar el servicio de comedor para todo el alumnado que lo precise; adaptar y reducir el currículo, teniendo en cuenta también las necesidades emocionales del alumnado; establecer medidas para proteger a los trabajadores y trabajadoras en situaciones de vulnerabilidad y sensibilidad; y conceder permisos retribuidos de conciliación.