ELA rechaza las bases para la Ley de Educación por estar elaboradas a espaldas de la plantilla y aceptar el marco normativo y curricular impuesto por el estado español

04/04/2022
Representantes de ELA de las ikastolas, de la educación pública y de centros de iniciativa social coinciden en denunciar la falta de contenido de las bases para la nueva Ley de Educación. En opinión de las plantillas de los distintos subsectores, la escenificación de un acuerdo se ha impuesto a los contenidos del mismo, que perpetúa los errores y carencias del sistema educativo actual.

Representantes del ámbito educativo de ELA se han mostrado hoy muy críticos con las bases de la Ley de Educación, en una rueda de prensa en la que han participado trabajadores y trabajadoras de ikastolas, de centros de educación de Iniciativa Social, docentes de la Educación Pública, personal de cocina y limpieza y personal de Educación Especial de la Educación Pública y Haurreskolak.
Y es que comparten el diagnóstico de que las decisiones tomadas y consensuadas durante años por patronales, fuerzas políticas y gobiernos hacen que cada vez haya más dificultades para euskaldunizar al alumnado, y que cada vez sea más uniformador, mercantilista y segregador el actual sistema educativo. Frente a ello, ELA tiene claro que hay que cambiar esta realidad, y para ello hay que tener como meta un sistema educativo propio con una red única, euskaldun, pública, inclusiva y diversa, con condiciones laborales adecuadas. Y tienen claro que una transición efectiva para llegar a ese objetivo, requiere necesariamente contar con todo el personal que integra el sistema educativo.
En el proceso que se ha abordado en el Parlamento, sin embargo, no ha sido así, ni parece que haya intención para ello, dicen. Así, atendiendo al proceso de elaboración y contenido de las bases aprobadas recientemente en el Parlamento para la elaboración de la Ley de Educación, extraen tres conclusiones principales:

  • Que estamos ante un proceso que se está llevando a cabo de espaldas a las trabajadoras y trabajadores, sin su participación y sin reparar en las condiciones de trabajo.

  • Que el único objetivo de los partidos políticos en este proceso ha sido el de mostrar su capacidad de acuerdo, simulando mejoras sustanciales, aunque no se hayan acordado cambios reales en las cuestiones fundamentales.

  • Que estamos ante una propuesta para perpetuar el actual sistema educativo. Básicamente han utilizado dos vías para dejar todo igual: por un lado, utilizar la literatura y la abstracción para que cada cual pueda interpretar el mismo contenido según le interese. Por otro lado, se han reconducido a reglamentos o decretos posteriores a su aprobación las cuestiones que no van a poder ser consensuadas en la ley.

Especialmente grave es que los partidos firmantes del acuerdo, en lugar de elaborar una ley para la construcción de un marco normativo y curricular propio, han dado el visto bueno al marco curricular y normativo impuesto desde el estado español y han dado su apoyo a la construcción de una ley de educación que acepta la sumisión al mismo. La creencia de que se puede hacer una ley vasca transformadora sin discutir el marco normativo es pura ficción.

Por último, he aquí las peticiones de ELA de cara a la futura Ley de Educación:

  • Definición del sistema al que queremos ir. Debe fijarse como meta un sistema educativo propio, euskaldun, público, inclusivo y plural con condiciones laborales adecuadas.

  • Marco normativo y curricular propio. Que se ponga en cuestión el marco competencial y que se establezca un proceso de construcción de un marco curricular propio ante la imposición competencial y curricular del congreso español.

  • Aumento de la inversión en educación. Llegar a la inversión media europea en Educación en 3 años para iniciar una andadura al 6% del PIB.

  • Condiciones laborales adecuadas en Educación. Dar pasos en la implantación de unas condiciones laborales adecuadas. Entre ellos, la negociación de procesos de consolidación del personal temporal en la educación pública, la homogeneización de las condiciones de las trabajadoras y trabajadores de las diferentes redes, o unas notables mejoras de ratios de forma que la reducción de la tasa de natalidad sea una oportunidad para mejorar la calidad educativa.

  • Educación sin segregación. Implantación de medidas concretas para acabar con la segregación. Entre ellas, la desaparición de todo tipo de cuotas, la implantación de mecanismos de transparencia de la financiación, el control de actividades y equipamientos o la implantación de una única oficina de matriculación.

  • Hacia una red única. Diseño de medidas de transición para una red única que supere la actual distribución de redes y sea pública. Estableciendo por ejemplo, de un marco estable de publificación para aquellos centros que así lo deseen.

  • Educación euskaldun. Implantación del modelo de inmersión lingüística en euskera para garantizar el conocimiento del euskera del alumnado.

  • La educación al margen del interés de los mercados. Medidas para la desmercantilización del sistema educativo, como garantizar recursos para el desarrollo de software libre.

ELA trabajará y organizará asambleas en los centros escolares e impulsará en los próximos meses la colaboración con los agentes que estén dispuestos a impulsar las movilizaciones y huelgas necesarias para que el personal del sistema educativo y las condiciones laborales sean tenidas en cuenta en la Ley de Educación, así como para condicionar y mejorar sus contenidos.