La Inspección de Trabajo vuelve a demostrar en Tubacex que no es un instrumento eficaz de cara a garantizar la salud de las y los trabajadores

El 2 de abril el Comité de Empresa de Tubacex presentó una denuncia ante Inspección de Trabajo referido a que la dirección de la empresa había ordenado retomar la actividad y en opinión del Comité, ello no estaba ajustado a la Ley y no se cumplían las normas mínimas de seguridad para evitar contagios. Se añadió en la denuncia la información de que 28 miembros de la plantilla estaban en cuarentena, y otros 60 en situación de aislamiento.

Desde el 2 de abril hasta el 8 el Comité no ha tenido información alguna sobre actuaciones de Inspección de Trabajo. El día 8 de abril el Comité recibió la resolución de Inspección de Trabajo, según la cual, emite una serie de advertencias referidas a la empresa sobre protección ante el Covid-19. A partir de ahí, y en caso de que no se cumplieran, la misma resolución destaca que habría que instar al Ministerio de Sanidad del Gobierno de España de cara a que pudiesen valorar la posible suspensión de la actividad de la planta en caso de grave riesgo de salud.

ELA vuelve a constatar la nula voluntad de Inspección de Trabajo (trasladable a otras administraciones de la CAPV) de ser un instrumento real y eficaz de cara a garantizar la salud de las plantillas en esta crisis del Covid 19. No es aceptable que Inspección de Trabajo, que ya en una denuncia previa hizo caso omiso a las peticiones del Comité, vuelva a actuar casi de la misma forma.

Desde la presentación de la denuncia nadie de Inspección ha contactado con el Comité para interesarse por la situación en Tubacex. No se conoce visita alguna de ningún Inspector/a a las plantas de Laudio y Amurrio. Y ahora, nos encontramos 6 días después de que el Comité solicitase la actuación de Inspección, con una serie de advertencias que ni Inspección misma se declara competente para hacerlas efectivas.

ELA denuncia que el Gobierno Vasco, mediante Inspección de Trabajo, ha demostrado, otra vez en Tubacex, que no es un Gobierno eficaz de cara a proteger la salud de trabajadores y trabajadoras, y en consecuencia, de la sociedad en general. Su prioridad, lamentablemente, está en no asumir sus responsabilidades y, en consecuencia, no molestar a las empresas que no cumplen las normas en salud laboral.