ELA-Concertada Nafarroa se solidariza con la plantilla de Claret Ikastola-Donostia y denuncia que el Acuerdo de Recolocación de Navarra es papel mojado

Claret Ikastola de Donostia abrió sus puertas en 1927 en el barrio de Gros. Desde entonces miles de niños, niñas y jóvenes han pasado por sus aulas. Durante este tiempo hemos sido muchos los profesores y profesoras, personal de servicio, los que hemos acompañando a familias y alumnado hasta crear la actual comunidad educativa.
A día de hoy somos 29 los trabajadores que conformamos la plantilla de Claret ikastola: profesores, educadoras, personal de administración, de limpieza y otros servicios, con una media de 25 años de antigüedad.
El año pasado recibimos la decisión del cierre de la ikastola. En un principio los claretianos nos trasladaron la idea de llevar a cabo el cierre en dos cursos. Pero antes del comienzo del plazo de matriculación, las familias recibieron por parte del director general una carta en la que se daba por seguro el cierre del centro a fecha de 1 de septiembre del 2019, invalidando el planteamiento hecho anteriormente.
Los trabajadores y trabajadoras de Claret Ikastola queremos plantear nuestra situación actual:
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Nos hemos reunido con la representación claretiana en varias ocasiones para intentar que las condiciones del ERE de extinción sean lo más dignas y justas posibles.
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Nos han comunicado que tan pronto reciban desde el departamento de Educación la confirmación de falta de conciertos para el próximo curso, presentarán el ERE de extinción.
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Claret Ikastola forma parte de la patronal EIB (Eusko Ikastola Batza), por lo tanto se nos aplica el convenio colectivo de las Ikastolas. El artículo 21 de este convenio recoge un sistema de recolocación para los excedentes generados en las ikastolas por un descenso de matriculación, al que pedimos poder optar. ¿Si este proceso se ha llevado a cabo en otras ocasiones, por qué ahora no? ¿Por qué la dirección y la patronal no quieren poner este proceso en marcha?
Por otro lado, los claretianos tienen en Euskal Herria otros dos centros educativos: Claret Askartza en Leioa y Claret Larraona en Iruña. Hemos planteado la posibilidad de recolocación en los centros mencionados, pero nos han asegurado que no hay opción.
Percibimos una postura cerrada por parte de la delegación claretiana y poca voluntad para evitar los despidos y negociar una salida digna de los trabajadores y trabajadoras, lo cual nos resulta realmente doloroso.
De momento, los términos que se nos han adelantado se basan en los mínimos marcados por la ley. Pedimos unas condiciones dignas y creemos que hay medios para ello.
A lo largo de todos estos años la implicación de los trabajadores y trabajadoras con el Proyecto Educativo de Claret Ikastola ha sido plena, con una formación continua. Hemos trabajado conjuntamente para llevar a cabo diferentes proyectos como la transformación en Comunidad de Aprendizaje, consecución de diferentes reconocimientos…
La entidad claretiana ya tiene tomada la decisión de cierre, y ante ella los perjudicados y perjudicadas son los alumnos y alumnas, familias y trabajadores y trabajadoras.
Por todo lo dicho, los trabajadores y trabajadoras queremos mostrar nuestro desacuerdo ante esta situación y pedimos una salida digna.
Hoy queremos interpelar a la Entidad claretiana y a la patronal:
Los trabajadores y trabajadoras de Claret Ikastola hemos educado a nuestros alumnos y a nuestras alumnas en los valores del Ideario Claretiano: compromiso con la sociedad, solidaridad, justicia, respeto, espíritu crítico… Valores que nos cuesta percibir en este proceso de cierre.
Por lo tanto pedimos que antes de plantear el ERE pongan en marcha el proceso de recolocación y las condiciones que se planteen sean dignas.