¡No a la construcción del muro del Puerto de Santurtzi!
Representantes del Gobierno Vasco refrendan esta decisión y argumentan, contra toda evidencia, que este muro garantiza los derechos humanos de todas las personas. En realidad, la construcción de ese muro responde a la decisión política de primar los intereses de la empresa Brittany Ferries, que explota la línea del ferry que va a Gran Bretaña. Así, una vez más, se constata que las políticas de las instituciones priorizan los intereses económicos de las empresas en vez de la defensa de los derechos humanos, económicos, sociales y culturales de las personas.
Queda claro quién tiene prioridad en la repartición de los derechos. La criminalización de las personas inmigrantes y refugiadas es una constante, y la incompatibilidad entre negocios y derechos humanos queda patente. La protección de las personas en mayor riesgo de vulnerabilidad y exclusión social tendrá que seguir esperando.
Ante ello, ELA reitera su compromiso en la lucha por los derechos para todas las personas y en el ¡no a los muros!