La liquidación de La Naval es otro paso más en la desindustrialización de Ezkerraldea

Desde ELA queremos mostrar nuestra denuncia y más hondo pesar por el desguace y liquidación que ha sufrido La Naval. La actualidad coloca el foco en la adjudicación por parte de VGP de los activos del astillero, pero consideramos imprescindible analizar lo ocurrido los últimos años para entender como hemos llegado a esta situación:

• El 27 de enero de 2005 la federación del metal de ELA, ante el acuerdo para privatizar el astillero por parte de CCOO, UGT y el Gobierno del PSOE señalaba lo siguiente: " ELA continúa exigiendo la realización de un plan industrial antes de acometer ninguna medida, así como la titularidad pública del astillero. Son éstas, cuestiones necesarias para garantizar el futuro del empleo, igual que la actividad económica que genera entre la industria auxiliar. Igualmente, ELA considera que, tras la primera fase en que la Administración española ha de asumir sus obligaciones en el relanzamiento de La Naval, el Gobierno Vasco debe adoptar una posición más activa en la defensa del empleo de esta empresa y del inducido en la industria auxiliar, máxime cuando va a afectar a una comarca que ya está duramente castigada".

• Desde la privatización del astillero la plantilla fue menguando de manera escandalosa, llegando a ser unicamente 186 los integrantes de la plantilla. Los barcos construidos los últimos años, se basaron en la utilización masiva de personal de subcontratas, con condiciones laborales inestables y precarias.

• La dirección del astillero, en manos de Ingeteam y Murueta fue nefasta. La negligente actuación de dichas empresas facilitaron la quiebra. Una vez más, desde la administración pública no se realizó control alguno ni se expreso censura alguna ante esta actuación empresarial.

• La impunidad en la que se ha actuado en la Naval se refleja en lo ocurrido en septiembre de 2017 cuando seis personas accedieron a los muelles de La Naval de Sestao de noche con la intención de llevarse un buque y empezaron a soltar todos los cabos que le unían a las dársenas del astillero.
• El Gobierno de Gasteiz se negó reiteradamente a incorporar capital en el Astillero aduciendo que la legislación Europea negaba esa posibilidad. Simultanemante otros Gobiernos de la UE llegaban incluso a nacionalizar astilleros que se encontraban en dificultades.
• Esta semana hemos conocido que VPG se ha adjudicado los activos de la Naval. Su proyecto no pasa por construir barco alguno y según las informaciones aparecidas en los medios de comunicación la mayor parte de la actividad futura será unicamente logística.

Desde ELA, y después de recordar brevemente lo ocurrido en  los últimos años, queremos señalar que el desenlace no es ninguna sorpresa. La inexistente política industrial del Gobierno de Gasteiz está desindustrializando Ezkerraldea. La única actividad del Departamento de desarrollo económico es la de generar notas de prensa para desviar su responsabilidad.  Desde la privatización, continuando con la inexplicable dirección empresarial, unido a una constante falta de apoyo e involucración pública, la suerte de la Naval estaba echada. Euskal Herria pierde una empresa estratégica, Ezkerraldea la capacidad de generar miles de puestos de trabajos. Serán sustituidos por menos empleo, más precariedad y probablemente por más especulación urbanística. La responsabilidad de lo ocurrido en la Naval tiene nombres y apellidos, como quienes han perdido su puesto de trabajo.