ELA exige al Consejo Vasco de Finanzas que destine el aumento de recaudación a políticas sociales y que se paralice la rebaja del Impuesto de Sociedades

12/02/2018
El 13 de febrero el Consejo Vasco de Finanzas se reunirá para liquidar la recaudación de las haciendas de la CAPV en 2017. El año pasado, dicha recaudación ascendió a 14.473,9 millones de euros, 976 millones más de lo inicialmente presupuestado. ELA reclama que el incremento de la recaudación se destine en su totalidad a los servicios públicos (Sanidad, Educación) y a la mejora de las prestaciones sociales.

A pesar de este aumento, los presupuestos de las instituciones vascas continúan siendo muy restrictivos:

El Gobierno vasco acordó con Rajoy el cumplimiento de la regla de gasto, lo que supone limitar fuertemente el crecimiento del presupuesto de 2018, optando de esa manera por continuar con la política de recortes.

La regla de gasto, que no hubiera salido adelante sin el voto favorable del PNV, establece un límite de aumento de los presupuestos del 2,4% para todas las instituciones. Lo aprobado obliga a destinar al pago de la deuda el incremento de la recaudación que se produzca.

No obstante, la regla de gasto sí permitiría incrementar el presupuesto por encima de ese límite si se aprobase una reforma fiscal que incrementara los ingresos. En vez de eso, en la CAPV, el PNV, el PP y el PSE-EE han acordado una rebaja de 4 puntos en el Impuesto sobre Sociedades. ELA quiere denunciar que los responsables de esa reforma no han presentado cálculo oficial alguno que cuantifique el efecto que va a tener sobre la recaudación.

Acordar con el PP y cumplir la regla de gasto afecta directamente al Concierto Económico, porque impide que las administraciones vascas, aunque tengan recursos, puedan decidir cuánto y en qué gastan. La regla de gasto erosiona aún más el autogobierno.

ELA señala que las instituciones de la CAPV (Gobierno vasco y Diputaciones Forales) han organizado una ceremonia de la confusión para ocultar los efectos reales de estas decisiones.

Ante todo ello, ELA reclama que el incremento de la recaudación se destine en su totalidad a los servicios públicos (Sanidad, Educación) y a la mejora de las prestaciones sociales. Con ese objetivo, demandamos una modificación de los presupuestos de 2018 del Gobierno vasco y de las Diputaciones Forales que concreten los incrementos presupuestarios que se deben realizar.

Además, ELA exige que se paralice la tramitación de la rebaja del Impuesto sobre Sociedades. En primer lugar, debe ser calculado su efecto en la recaudación (expertos en fiscalidad han afirmado que el “regalo” fiscal hecho a la patronal rondaría los 200 millones de euros). La reforma fiscal que necesitamos debe hacerse para aumentar los impuestos a los beneficios empresariales, a las rentas altas y al capital.

Por otro lado, ELA exige al Gobierno vasco que renuncie a acordar con el Estado la aplicación de la regla de gasto, y que haga públicos los cálculos con que dicha regla se aplica al presupuesto.

ELA afirma que es incompatible blindar las políticas sociales y, al mismo tiempo, cumplir con la involución social que supuso la reforma del artículo 135 de la Constitución, la Ley de Estabilidad Presupuestaria y sus consecuencias (límite de déficit, prioridad en el pago de la deuda y regla de gasto). Esa política sigue representando un golpe de estado contra un modelo de sociedad justo y solidario.

Durante la crisis las administraciones vascas justificaron los recortes diciendo que caía la recaudación y, ahora que la recaudación aumenta, el PNV y el PP acuerdan límites en la política para que las desigualdades sociales sigan aumentando.