ELA exige que se modifique el sistema de fijación de precios de la luz y que se publifique el sector energético

Para la generación de energía se utilizan diversas fuentes y el sistema las utiliza en función de una jerarquía, utilizando primero las renovables (producción más barata) y después las no renovables (producción más cara). Pero para fijar el precio no se hace el cálculo por el coste real. Se calcula por el precio de la última unidad de energía que entra en el sistema. Según la jerarquía suele ser el gas natural el que entra último, que es el que tiene una producción más cara, y esto supone pagar toda la energía como si se produjera con gas natural. Es decir, cuanto más alto es el consumo, el precio es más caro. Este sistema solo favorece a las empresas eléctricas, y es totalmente injusto, sobre todo porque en invierno y cuando tenemos olas de frío continuamente la factura de la energía sube muchísimo, y no porque consumamos más, sino porque el sector energético utiliza mecanismos para generar más beneficio aprovechando esa necesidad, con la complicidad de los gobiernos.

En la década de los 90, cuando se privatizó y liberalizó el sector energético, se quiso vender que los precios de mercado de los sectores privados serían más competitivos en beneficio de los consumidores. Ha quedado claro que la privatización de la energía, como en otros muchos sectores, sirve para beneficiar a las grandes empresas del sector y que los consumidores quedamos totalmente desprotegidos ante ellos. La privatización no ha funcionado para mantener precios justos, sino para que unos pocos hagan negocio. Es necesario volver a publificar el sector energético.

Por todas estas razones ELA exige un cambio en el sistema de fijación del precio de la electricidad y la publificación del sector energético.