Euskaltel, nuevo paso en el proceso de privatización, pérdida de control público y desarraigo

15/04/2019
En un nuevo paso en el proceso de privatización, pérdida de control público y desarraigo de Euskaltel, el fondo de inversión británico Zegona se ha convertido en el accionista mayoritario de la empresa. El Gobierno Vasco es responsable directo de esta situación.

Euskaltel se creó con dinero público en 1995 (el Gobierno Vasco aportó el 40% y las antiguas Cajas de Ahorro, el 60% restante). Se ha producido un proceso de privatización de libro: en 2012 el 50,1% del capital se dejó en manos privadas (el fondo ICV compró el 49,1%), a precio de saldo. En 2015, con la valoración realizada para la salida a Bolsa, ICV pegó un pelotazo, vendiendo todas sus acciones por más del triple del precio de compra. Ningún motivo económico justificaba esa diferencia tan grande. Hoy en día más del 80% del capital de Euskaltel está en manos de fondos de inversión u otro tipo de inversores privados bursátiles; el Gobierno Vasco no tiene ni una sola acción, y Kutxabank (que ahora es un banco) dispone de menos del 20% del capital, porcentaje que poco a poco se va reduciendo, tendencia que sin duda se va a mantener en el futuro.

De este modo, las instituciones vascas han perdido, de manera voluntaria, el control público de una empresa tractora en un sector estratégico. Abandonar instrumentos tan importantes como la principal entidad financiera (como ha ocurrido con la bancarización de Kutxabank) o Euskaltel supone una irresponsabilidad y una política nefasta.

PROCESO DE PRIVATIZACIÓN DE EUSKALTEL
PROPIEDAD DEL CAPITAL (1995-2019)

1995

2012

2015 (Salida a Bolsa)

Abril 2019

Gobierno Vasco, (40% a través de Euskalnet)

Cajas de Ahorro, 60%

Kutxabank, 49,9%

International Cable ICV, 49,1%

Iberdrola, 2%

Kutxabank, 30,1%

Empleados y directivos, 2%

Fondos y otros, 68%

Kutxabank, 19,88%

Fondos y bolsa, 80,12%

Fuente: Gabinete de Estudios de ELA

ELA denunció en 2015 todo este proceso, y se movilizó el día de la salida a Bolsa de la empresa. La salida a Bolsa fue aprovechada para que 10 personas del equipo directivo recibiesen un bonus de más de 40 millones de euros, en especial su presidente, Alberto García Erauzkin, que obtuvo 9,2 millones.

Los niveles de beneficio de Euskaltel son escandalosos y crecientes. En 2018 tuvo una cifra de negocios de 330 millones de euros, y un beneficio neto de 92 millones. La mayor parte de su beneficio va a dividendos (55,4 millones). De esta manera, tras socializar las pérdidas generadas en los primeros ejercicios, los beneficios se están privatizando.

Por su parte, los gastos de personal (25,5 millones en 2018) son apenas la cuarta parte de sus beneficios, incluyendo en ese coste el salario de los 31 directivos (sobre una plantilla de 334 personas).

DATOS DE EUSKALTEL (2017-2018, MILLONES DE EUROS)

 

2017

2018

BENEFICIO NETO

77

92

DIVIDENDO

49,5

55,4

GASTOS PERSONAL

24,9

25,5

Fuente: Euskaltel.

Es evidente que el Gobierno Vasco es responsable directo de todo esto, aunque trate de eludir su responsabilidad, haciendo llamamientos genéricos al arraigo de Euskaltel. Cabe llamar la atención sobre las declaraciones del Lehendakari Iñigo Urkullu, aludiendo a que los Estatutos de Euskaltel “garantizan el arraigo”, al recogerse que para sacar la sede social de la CAPV se necesita el 75% de los votos. Además de que nada garantiza que no se puedan cambiar los Estatutos de una empresa y que se obvia que ya el 80% del capital está en manos de fondos y otras entidades, limitar la cuestión del arraigo y la orientación o tipo de empresa a dónde tiene la sede es una caricatura que muestra la falta de argumentos del Gobierno para defender su actuación. La prioridad de los fondos de inversión, y Zegona no lo oculta, es maximizar el beneficio que obtiene con Euskaltel en el menor tiempo posible, y eso se hace a costa de la clientela, de los trabajadores y trabajadoras, y repartiéndose el máximo dividendo posible (dinero que no se reinvierte en la empresa).