LEY DE VIVIENDA

La nueva ley de vivienda aprobada en el Parlamento Vasco es una oportunidad perdida

La nueva ley de vivienda aprobada en el Parlamento Vasco es una oportunidad perdida
La ley de medidas urgentes en materia de vivienda de la CAPV promovida por PNV y PSE beneficia los intereses privados y no dará solución a la crisis habitacional

El PNV y PSE, mayoría en el Parlamento Vasco, han aprobado hoy la Ley de Medidas Urgentes en Materia de Vivienda. Esta ley llega en un momento de crisis habitacional sin precedentes, con unos precios de la vivienda que han superado los de la burbuja de 2007. La vivienda se ha erigido como el principal problema para la sociedad: según el último informe de Foessa, más de 120.000 hogares caen por debajo del umbral de la pobreza severa una vez pagada la vivienda y los suministros.

A pesar de la gravedad de la situación, la ley del PNV y el PSE sigue la misma lógica inmobiliaria de las últimas décadas: impulsar la compraventa de vivienda y construir más vivienda libre para que las empresas constructoras y los bancos ganen más. Clara muestra de ello es la rebaja del 75% al 60% la exigencia de construir vivienda protegida en las nuevas promociones. Se abre una vía para que las empresas puedan construir más vivienda libre, mucho más rentable, en detrimento de vivienda protegida.

Además, no se ha aprovechado la ley para desarrollar la ley del Estado español en torno a las zonas tensionadas, con el objetivo de intervenir el mercado del alquiler y reducir así los precios desorbitados de los alquileres. Tampoco se implementan medidas efectivas para hacer frente a la proliferación de viviendas turísticas en nuestras ciudades, que están reduciendo el parque de vivienda residencial con el objetivo de hacer negocio.

ELA denuncia también la falta de liderazgo del Gobierno Vasco en materia de vivienda, que utiliza el ámbito competencial como excusa para no tomar medidas efectivas. En ese sentido, deja en manos de los ayuntamientos la declaración de zonas tensionadas, la aplicación de cánones por vivienda vacía, las limitaciones en materia de vivienda turísticas o la propia rebaja de suelo del 75% al 60% para la construcción de vivienda protegida. No existe un política coordinada en materia de vivienda promovida desde el Gobierno Vasco.

ELA reivindica que para revertir la situación es necesario que el problema de la vivienda se aborde en su conjunto, para lo que es imprescindible: garantizar el derecho subjetivo a la vivienda por ley y poner fin a la alternativa de las prestaciones; construir viviendas protegidas estrictamente de alquiler; aumentar el gasto público de vivienda destinando al menos el 2% del PIB de forma permanente; declarar zona tensionada toda la CAPV, sin excepción y crear un índice de alquiler máximo de vivienda; movilizar las 45.000 viviendas vacías y destinarlas al alquiler; avanzar hacia un modelo público de construcción de vivienda y limitar y controlar las Viviendas de Uso Turístico y los alquileres temporales.