Una de cada cuatro personas jóvenes se encuentra en desempleo

En cuanto a los sectores, la ocupación en la industria ha sufrido un descenso muy importante respecto al trimestre anterior, la creación de empleo, una vez más, proviene del aumento del sector servicios. La encuesta también señala que el aumento del empleo procede de los trabajadores y trabajadoras por cuenta propia, los cuales han crecido en 15.600.
Si reparamos a la temporalidad de los contratos, vemos que en el último trimestre las personas con este tipo de contrato han crecido en 7.200, mientras que las de duración indefinida se han reducido en 1.800. Así pues, la temporalidad sube y sobrepasa el 25% en Hego EH, más de 10 puntos por encima del de la UE. Por lo tanto, podemos concluir que aunque los datos a primera vista parecen positivos, detrás se esconden empleos con un alto índice de temporalidad y una creación de empleo inestable basada en la creación de empleo autónomo.
En cuanto al desempleo, el año 2021 ha terminado con 119.900 personas desempleadas en Hego Euskal Herria, 17.500 menos que el trimestre anterior. La tasa de desempleo en HEH ha bajado del 10%, en Navarra se ha situado en el 9,9%, mientras que en la CAPV ha bajado al 8,3%. Aunque, no todo son buenas noticias en cuanto al desempleo, ya que uno de cada cuatro personas jóvenes se encuentra en esta situación y por otra parte la tasa de desempleo en la Unión Europea sigue situándose muy por debajo (6,7%).
Nos encontramos un momento clave en lo que se refiere a la reforma laboral. PSOE y UP pactaron su derogación total durante esta legislatura. Sin embargo, el acuerdo alcanzado entre el Gobierno, la patronal y los sindicatos CCOO y UGT contiene solo unas ligeras mejoras, a cambio de consolidar el grueso de unas reformas que fueron muy perjudiciales para la clase trabajadora. ELA considera que esta reforma laboral no puede ser aprobada y exige la derogación de las reformas de 2010 y 2012. Por ello, ELA insta a los partidos políticos en el Congreso a no aprobar esta reforma, y reanudar las negociaciones, pero esta vez sin dar derecho de veto a la Patronal.