Mercedes, con 14 casos positivos y 300 personas en aislamiento, propone un ERTE hasta el final del Estado de Alarma
Tras esta noticia y dentro del contexto que está viviendo el conjunto de la sociedad de Euskal Herria y la ciudadanía de Gasteiz en particular, ELA entiende que hay que hacer una lectura pausada de la decisión de la empresa y de las razones que nos han llevado a este punto.Siendo Gasteiz foco de transmisión comunitaria de la enfermedad, a día de hoy la propia memoria del ERTE en Mercedes reconoce que entre la plantilla existen 14 positivos confirmados y más de 300 trabajadoras y trabajadores en aislamiento forzoso en sus domicilios
ELA quiere felicitar a la plantilla y al comité de empresa por su ejemplar actitud ante esta situación de riesgo contra la salud, puesto que su pacífica reivindicación fue la que hizo que la empresa fuese consciente de la situación y de la necesidad de no exponer a más personas al contagio.
De haber mantenido la actividad normal en Mercedes tal y como quería la dirección y el Gobierno Vasco: ¿Cuántas personas más estarían ahora mismo infectadas en Gasteiz? No hay espejo más digno en el que mirarse que el de las trabajadoras y trabajadores poniendo la vida en el centro por encima de cualquier interés económico, precisamente lo contrario al mensaje que venía trasladando la empresa en los días anteriores.
En la reunión celebrada el 24 de marzo la empresa ha volcado toda su frustración en la plantilla, poniendo encima de la mesa una propuesta de ERTE por fuerza mayor, sin ningún tipo de garantía ni protección por encima de la legislación y sin llegar a reconocer explícitamente la evidencia de la imposibilidad de cumplir con las medidas de protección básicas contra los contagios. Es especialmente vergonzoso que una empresa con beneficios estratosféricos como ésta no coopere con la situación de desprotección en la que queda la clase trabajadora en el contexto en el que vivimos.
ELA recuerda que vivimos días muy convulsos para los que ninguno estábamos preparados y, además, desgraciadamente tenemos que asistir con frustración y enfado a declaraciones de políticos y responsables patronales cuyo mensaje traslada una única preocupación, que es la del beneficio económico e incluso el aprovechamiento de una situación de necesidad. Es hora de que tanto Mercedes como el resto de empresas den ejemplo y muestren preocupación real por lo que a día de hoy es importante: la salud y el bienestar de las personas que formamos parte de la sociedad. Es en ese sentido en el que interpelamos a la empresa, esperando que de marcha atrás en su actitud, reconozca su imprudencia, agradezca a la plantilla el mensaje colectivo enviado a la sociedad, e implante medidas cuyo objetivo principal sea proteger a los trabajadores y trabajadoras.