El Ayuntamiento de Bermeo se niega a reunirse con el servicio de limpieza que cumple 132 jornadas en huelga
ELA recuerda que el Ayuntamiento es el responsable directo de este conflicto, quien
ha decidido subcontratar el colectivo feminizado de limpieza, pero mantener público el sector masculinizado, algo que genera una brecha salarial entre ambos colectivos. No en vano, en el servicio de limpieza de edificios y locales, donde la mayoría son mujeres, el sueldo base anual es de 15.943,20 euros. En la limpieza viaria, en cambio, donde prácticamente todos son hombres, el salario base anual es de 25.189,79 euros, sin contar con los pluses por trabajar a la intemperie.
Además, es el consistorio quien decide dejar la gestión del servicio que prestan en manos de una empresa privada, sin ejercer ningún control sobre esta gestión, y sin tomar ninguna medida cuando se les ha notificado que las empresas privadas no cumplían con el pliego que regula las condiciones laborales de las trabajadoras, “dejándolas en total vulnerabilidad”.
Asimismo, ELA denuncia que el Ayuntamiento de Bermeo vulnera su derecho a la huelga y la boicotea contratando a nuevas limpiadoras, todo ello en medio de una pandemia donde la limpieza adquiere una importancia aún mayor.
Así las cosas, el sindicato insta al consistorio a tomar como punto de referencia a las limpiadoras de sanidad y educación, quienes cuentan con el reconocimiento por los estamentos correspondientes -Osakidetza y Gobierno Vasco-, ya que estas instituciones firmaron un convenio propio para evitar semejantes diferencias salariales entre sus trabajadoras.
Equiparación que ELA ha alcanzado, a través de la lucha sindical, en varios Ayuntamientos: Durango, Amorebieta, Ermua, Zaldibar, Elorrio…