Nuevas movilizaciones en el sector de Conservas y Salazones de Bizkaia
En opinión de ELA, después de diecisiete reuniones de la mesa sectorial, toca hacer balance de la situación.
ELA ya en julio se dirigió al resto de sindicatos expresando su opinión sobre como se estaba desarrollando la negociación sectorial. Para nosotras/os la situación de bloqueo instaurada por la patronal sólo era posible quebrantarla mediante las movilizaciones y más concretamente por huelgas de días enteros, y a día de hoy seguimos pensando lo mismo.
CCOO, LAB y UGT se desmarcaron después del verano de la plataforma unitaria que hasta ese momento manteníamos los cuatro sindicatos.
Estos sindicatos posteriormente han presentado dos nuevas propuestas rebajando sus pretensiones en salarios, fijezas, complementos de bajas, mutuas, etc. La patronal, por su parte, dice que traerá a la siguiente reunión la respuesta a la última propuesta presentada en la última reunión de la mesa negociadora. Actualmente, lo único que ofrece es garantizar el IPC y mantener la redacción del actual convenio con todos sus atropellos. A todas luces, inaceptable.
El resto de sindicatos con su propuesta obvian temas tan importantes como la cláusula de inaplicación (que lo que se firme se cumpla), limitar la flexibilidad existente en el actual convenio, reducir la jornada laboral anual (conciliación de la vida laboral y familiar, posibilidad de crear empleo..), etc.
A juicio de ELA, una vez más, la patronal se muestra muy cómoda, ya que no le interesa moverse de sus posiciones iniciales y vamos a tener que luchar mucho para poder arrancar un convenio que dignifique nuestras condiciones laborales. Ha quedado claro que aunque algunos sindicatos quieran tirar a la baja sus pretensiones, la patronal no está dispuesta a llegar a un acuerdo.
Por consiguiente, desde ELA nos reafirmamos en la plataforma unitaria. Para nosotras/os tan importante como los contenidos del convenio son las garantías de aplicación del mismo. Es decir, garantizar que lo que se haya firmado se cumpla y no lo que ha sucedido en dos empresas del sector durante la vigencia del actual convenio (intentar descolgarse de lo firmado). Seguimos tendiendo nuestra mano al resto de centrales sindicales, para que se avengan a la plataforma conjunta y defendamos nuestros derechos de forma contundente. Las movilizaciones convocadas para el día 30 de octubre (concentraciones frente a las empresas conserveras de Bermeo) tienen que ser el inicio de un camino de confrontación real en el sector, que inexcusablemente tiene que acabar con días de huelga.
Las empresas están obteniendo suculentos beneficios a costa del esfuerzo de las y los trabajadores del sector de conservas. Es hora de concienciar a nuestras compañeras/os, organizarlas y enseñar los dientes, tal y como lo hicimos el 8 de Marzo en la huelga feminista, y conseguir un convenio que dignifique las condiciones de trabajo y suponga un justo reparto de la riqueza generada. Para ello seguiremos luchando por un convenio que recoja incrementos salariales sustanciales, garantías de aplicación, reducción de jornada, mejoras en licencias, blindajes ante las reformas laborales y que realmente ataje la precariedad existente en el sector. Es posible y es necesario.