MESA Conservas de Bizkaia

ELA exige medidas para eliminar la brecha salarial y la desigualdad de género

17/09/2025
Los sueldos de muchas de las trabajadoras están cerca del SMI. Los grupos más feminizados están peor remunerados y la diferencia puede alcanzar los mil euros anuales en las categorías mejor remuneradas. La próxima reunión de la mesa negociadora se celebrará el 6 de octubre.

ELA ha denunciado en la mesa de negociación del nuevo convenio de conserveras de Bizkaia la brecha salarial y desigualdad de género que existe en el sector. Para ello, ha entregado, tanto al resto de sindicatos como a las patronales, un informe donde se denuncian los bajos salarios (en muchas ocasiones muy cerca del SMI) y la brecha salarial de hasta 1.000 euros anuales que existe entre distintos grupos profesionales. Asimismo, alerta del uso abusivo de contratos fijos discontinuos y parciales que se dan en ámbitos tan feminizados como las conserveras (más del 80% a niveles operativos), entre otras cuestiones.

En este sector trabajan alrededor de 600 personas. Las mujeres, que representan más del 60% del personal de producción, desempeñan principalmente tareas manuales de procesamiento, limpieza y envasado del producto. Aunque existen algunos procesos para modernizar la labor productiva, la mayoría de centros de producción mantienen esquemas laborales tradicionales, con condiciones que reflejan desigualdades estructurales de género.

Por ejemplo, muchos de los contratos son temporales y a tiempo parcial. Asimismo, se incumplen los calendarios laborales previstos, lo que aumenta de forma significativa la falta de estabilidad de las plantillas, y los contratos fijos discontinuos se aplican sobre todo en las categorías más feminizadas.

En cuanto a sueldos, además de percibir sueldos cercanos al SMI, existe una brecha salarial entre distintos grupos profesionales: los grupos más feminizados están peor remunerados que los grupos donde hay presencia de hombres, pese a que su labor se asemeje. La diferencia puede alcanzar los mil euros anuales en las categorías mejor remuneradas.

Cabe destacar también las malas condiciones laborales, con altas temperaturas y niveles de humedad que, junto con los movimientos repetitivos constantes que realizan las trabajadoras, causan enfermedades profesionales que en la mayoría de los casos no son reconocidas. Todo ello con un convenio que es de 1.720 horas anuales, muy por encima de otros sectores industriales tradicionalmente masculinizados.

Por todo ello, ELA considera que el nuevo convenio debe servir para terminar con la brecha salarial y de género que existe en este sector, y mejorar considerablemente la situación de estas trabajadoras mediante un incremento salarial, con contratos dignos y estables, y con medidas de seguridad adecuadas, entre otras cuestiones.

Estos puntos serán los que ELA defenderá en las siguientes reuniones entre patronales y sindicatos. Concretamente, la próxima reunión de la mesa de negociación se celebrará el próximo 6 de octubre a las 9:30 horas en la sede del PRECO, Bilbao.