ELA exige que subsanen inmediatamente los incumplimientos detectados en las obras de remodelación de Anoeta
ELA exige al Ayuntamiento de Donostia y a la Real Sociedad que asuman su responsabilidad en lo acontecido en las obras de remodelación del estadio de Anoeta. “Abusos, fraudes y falsificaciones en materias tan sensibles como salarios, jornadas interminables, cesiones ilegales de trabajadores, falsificación documental...” Así lo define Igor San José, responsable de construcción en ELA en Gipuzkoa, quien denuncia en las Juntas Generales de Gipuzkoa que lo ocurrido en el estadio de fútbol es consecuencia directa de una licitación a la baja con el único objetivo de ahorrarle dinero a la Real, a costa de todo”. Y ese todo, añade, “han resultado ser las condiciones laborales de los trabajadores y la salud laboral”. Todo ello ha sido constatado por la Autoridad competente en base a las denuncias efectuadas por ELA.
San José ha recordado que, tal y como predijo ELA, la remodelación del estadio de Anoeta iba a costar mucho más que los 50 millones de euros presupuestados inicialmente por el ente municipal Anoeta Kiroldegia. No en vano, según los cálculos de ELA, la obra nunca podría situarse por debajo de los 70 milones de euros, cálculo basado en obras similares realizadas en Donostia. Al igual que entonces, ahora vuelve a plantear las mismas preguntas. “¿A qué obedecía esta rebaja? ¿Quién se iba a hacer cargo de la diferencia?, ¿Qué supondría en la práctica?”.
El propio San José responde a la pregunta planteada. “La licitación fue premeditada, sí, porque todo indica que el único objetivo de estos gestores políticos fue que la Real Sociedad pagara lo menos posible a costa de ese `lo que sea´. Y el `lo que sea´ en cuestión ya se ha visto por dónde iba: a costa de precariedad laboral y fraude”.
Ofrece datos que sustentan lo denunciado:
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22 empresas denunciadas por ELA en esta obra.
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Más de 200 trabajadores con la documentación falsificada han trabajado en Anoeta.
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Más de 250 mil euros en sanciones (Podría llegar a superar los 400 mil euros).
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Más de 4,5 millones de euros de deuda en salarios (según cálculos de ELA/Diciembre 2018).
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Podría superar los 7 millones de euros en diciembre de 2019 (según cálculos de ELA).
Reitera que han seguido llegando más resoluciones favorables de Inspección de Trabajo que confirman oficialmente que “el fraude sigue latente”. El consistorio y el club, sin embargo, “siguen mirando hacia otro lado”. Subraya la importancia de que el Departamento de Trabajo del Gobierno Vasco haya decidido poner en manos de la Fiscalía algunos de los casos arriba relatados. “Da una idea de la gravedad de lo acontecido”.