ELA condena el plan de anexión de Cisjordania del Gobierno israelí

06/07/2020
ELA, como miembro de la Red Sindical Europea para la Justicia en Palestina -formada por 34 sindicatos europeos-, se adhiere al comunicado publicado por esta Red condenando el plan de anexión del Gobierno israelí.

El comunicado es el siguiente:

El plan del Gobierno israelí para anexar partes de Cisjordania ocupada es un golpe devastador para los derechos de los palestinos y palestinas y las perspectivas de una solución de dos estados, con un estado palestino viable junto a Israel. Las propuestas, basadas en el llamado 'Acuerdo del siglo' del presidente de los Estados Unidos Donald Trump, darán lugar a que enormes extensiones de tierra palestina, actualmente bajo ocupación militar, incluido el Valle del Jordán y los asentamientos ilegales, sean declarados unilateralmente parte de Israel, en violación de décadas de resoluciones de la ONU y del derecho internacional.

Durante más de medio siglo, la población palestina de Cisjordania ha soportado un sistema despiadado de derecho militar, que ha socavado sus derechos, incluida la libertad de movimiento, el trabajo decente, la salud, la educación, el agua y otros servicios públicos.

La comunidad internacional debe responder de inmediato a la llamada de la sociedad civil palestina y de las organizaciones de derechos humanos, incluidos los sindicatos, que piden "medidas efectivas" de los estados para evitar la anexión.

Como movimiento de sindicatos europeos, comprometidos con los derechos humanos y de los trabajadores y trabajadoras y el derecho internacional, instamos a la Unión Europea y a los gobiernos europeos a:

- Suspender el Acuerdo de Asociación UE-Israel, hasta que el Gobierno israelí cumpla con sus cláusulas sobre derechos humanos y retire su plan de anexión;

- Suspender el comercio de armas con Israel;

- Imponer una prohibición al comercio con los asentamientos ilegales israelíes y las empresas cómplices;

- Excluir a Israel de los programas de investigación europeos.

Además, hacemos un llamamiento al movimiento sindical para que cumpla con el llamado de los sindicatos palestinos y de la sociedad civil palestina a 'no hacer daño' (“do no harm”) y, por lo tanto, en términos de sus propias políticas de adquisiciones e inversiones que eviten las empresas que se benefician de cualquier manera cómplice de los asentamientos ilegales israelíes.