Demasiadas razones para detener el TAV
El tema del tren de alta velocidad (TAV) es muy recurrente en este boletín, pero es que tenemos razones para ello. No dejamos de conocer datos que nos demuestran que es una obra que nunca debería haber empezado; como el informe de rentabilidad financiera y social realizado por FEDEA, o directamente las declaraciones de responsables del Gobierno
Vasco. He aquí la última recopilación:
- Ningún TAV del estado español cubre los gastos de construcción de la línea, por el elevado coste y por el poco uso.
- En el corredor Madrid-Norte (en la que se integraría la Y Vasca), a diferencia de lo que sucede en otros corredores, no solo no se cubren los costes de construcción de la infraestructura, sino que las perdidas en la explotación contribuyen a incrementar el coste de la misma. ADIF, o Eusko Trenbide Sarea si asumiese la gestión como pretenden, tendría pérdidas por operar esta infraestructura.
- El Estado, a largo plazo, no sólo no recuperará lo invertido sino que el contribuyente deberá aportar un céntimo más
por cada euro invertido.
- Ademas es el único corredor que ni siquiera cubriría los costes variables tanto financieros como sociales.
- Las estimaciones indican que los usuarios que se desvían desde el vehículo privado y el avión al TAV son cada vez menos.
- El Gobierno Vasco no tiene datos de cuál puede ser la demanda de viajeros para el TAV entre las capitales vascas, ni ha
analizado cuál es el precio estimado del billete.
- Las obras avanzan, acumulando gastos y sobrecostes, mientras todavía todo está en el aire.
- El tren no será tan rápido como se planteaba al principio.
- La conexión con la red europea no está asegurada, ya que Francia lo retrasa en principio hasta el 2032.
- Los accesos a Bilbo y Gasteiz no están definidos, y de manera provisional se utilizarán las vías existentes.
- La duración del viaje ha aumentado desde el inicio de las obras: Donostia-Gasteiz en 55 minutos frente a los 34iniciales, Gasteiz-Bilbo en 43 minutos en vez de 28, y Bilbo-Donostia en 55 minutos y no 38. No marcan la diferencia comparado con el tráfico por carretera.
-La polémica persigue a muchos tramos de Gipuzkoa y Bizkaia por los altos sobrecostes, al igual que ocurrió en la línea Madrid-Barcelona, que hace unos meses llevo a los juzgados a varios políticos y empresarios.
Por estas razones y muchas más que ya hemos explicado anteriormente, ELA exige que se paralicen las obras, y que no se de más dinero público a esta infraestructura insostenible desde todos los puntos de vista. Por eso apoyamos y hacemos el llamamiento para ir el 13 de junio a Donostia a la manifestación para parar el TAV.