El proyecto de la línea del TAV entre Burgos y Gasteiz ratifica que tampoco llevará mercancías

El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana acaba de aprobar definitivamente el documento informativo del proyecto de la línea del TAV Burgos-Vitoria, que ratifica que será exclusivamente para el transporte de personas. ELA lleva años diciendo que el TAV no será para el transporte de mercancías. El Gobierno Vasco, sin embargo, se empeña en afirmar que será útil para las mercancías, sabiendo que no es cierto.

Es importante saber que el tramo Burgos-Vitoria del TAV será exclusivo para viajeros. El Gobierno Vasco, para justificar este proyecto inútil utiliza una y otra vez el argumento de que gracias al TAV se logrará sacar miles de camiones de las carreteras. Sabemos que ninguna de las líneas de TAV que hay por el mundo transporta mercancías, la propia Arantza Tapia lo admitió. Pero la confirmación de que tampoco lo hará aquí es importante para que esta vieja trampa del Gobierno Vasco quede en evidencia.

En 2017 el gobierno del PP lo dejó claro al presentar la línea Burgos-Vitoria. Dijo que sólo iba a ser para el transporte de personas, que los desniveles existentes en ese tramo hacían imposible el transporte mixto de personas y mercancías en la misma vía. Este argumento técnico sirve también para la totalidad de Euskal Herria, porque tiene un relieve muy abrupto y tendrá el mismo problema.

Cuando el ministro de Transportes del momento hizo estas declaraciones, el Gobierno Vasco, con Urkullu a la cabeza, dijo que no estaba de acuerdo con este diseño y que aún no se había cerrado el proyecto. Arantza Tapia también se reunió con el Gobierno español para exigir que el transporte de mercancías se realice a través del TAV. Entonces reconocieron que si el TAV no va a llevar mercancías entre Vitoria y Burgos en vano la Y Vasca las llevaría, porque no podría ser una línea europea y estatal unificada. Pero el Gobierno Vasco era consciente entonces de la realidad y exigieron que si era demasiado caro llevar mercancías a través del TAV, al menos en la red ferroviaria ya construida se añadiera una tercera vía para mercancías. Pero el Ministerio de Transportes hizo caso omiso al transporte de mercancías en el TAV y a la construcción de la tercera vía. Ahora que se ha hecho público el diseño definitivo de la línea de Burgos-Vitoria, además del cierre definitivo de la vía del TAV a las mercancías, el Ministerio no menciona nada en torno a la construcción de una nueva vía para mercancías o trenes de altas prestaciones en la actual línea ferroviaria.

ELA lleva años reivindicando que hay que mejorar la red ferroviaria actual, pero los gobiernos vasco, navarro y estatal no tienen el mismo interés. Siguen derrochando dinero público en el inaceptable proyecto del TAV, mientras hacen recortes en el gasto social y desmantelan las redes ferroviarias actuales. En consecuencia, tenemos una red de ferrocarriles que no es útil para las mercancías, y una red de cercanías que no tiene en cuenta las necesidades de las personas.

El cambio de modelo de transporte y movilidad es necesario para llevar a cabo la transición ecológica y social. Ahora tienen una oportunidad única para impulsar una red ferroviaria sostenible que ayude a combatir el cambio climático. Pero las personas y el medio ambiente no son la prioridad de los responsables políticos, tienen otros intereses.