El gobierno de Rajoy apoya los interes de las grandes eléctricas

Según Endesa, el cierre de la central fue por motivos económicos y ahora este obstáculo ha desaparecido, haciendo alusión al impuesto retroactivo al combustible nuclear gastado y a los residuos radiactivos. Estos meses de cierre Endesa e Iberdrola no han parado hasta que sus peticiones se han cumplido, el gobierno ha dado marcha atrás y una vez más les ha dado lo que querían. La ciudadanía tendrá que pagar de su bolsillo el coste de gestión de los combustibles nucleares gastados y de los residuos radiactivos.

El cierre de Garoña no fue por un simple motivo económico, las eléctricas no quisieron pagar las mejoras exigidas por seguridad por el Consejo de Seguridad Nuclear. Garoña no es segura y todas las personas que vivimos alrededor corremos un grave riesgo, que año tras año gobiernos y empresas quieren ocultar. Todavía no se ha hecho público cuando se hará la petición de la licencia, la fecha límite es el 6 de julio, pero mientras tanto desde ELA seguiremos luchando para que esta central no se ponga en marcha nunca más, porque es un riesgo para el medioambiente y las personas, y un sumidero de dinero público que no estamos dispuestos a pagar.