ELA participa en la primera Plenaria de la Cumbre de los Pueblos, paralela a la de Rio+20

Mikel Noval, responsable de política social de ELA y miembro de la delegación de este sindicato a la Cumbre de los Pueblos de Río de Janeiro, ha mostrado su satisfacción por el acuerdo alcanzado en la primera plenaria de la Cumbre, celebrada el día 19 de junio (que finalizó a las 21 horas, hora de Euskal Herria).
Se ha producido un acuerdo entre sindicatos, movimientos campesinos, ecologistas, de mujeres y otros movimientos sociales para denunciar las causas estructurales de la crisis y las falsas soluciones que los gobiernos y las transnacionales ofrecen en la cumbre oficial de Rio + 20.
La Cumbre de Rio+20 debería avanzar propuestas y compromisos para mejorar la justicia social y la justicia ambiental. Sin embargo, la mayoría de los gobiernos que toman parte en la cumbre oficial pretenden que de Río salgan acuerdos en sentido contrario, es decir, retroceder en lo que se refiere a la justicia social y ni siquiera llegar a lo que hace 20 años se alcanzó en Río en lo referente a la justicia ambiental.
Noval ha destacado que, frente a ello, cientos de organizaciones diversas hemos sido capaces de poner encima de la mesa las verdaderas causas de la actual crisis, “que tienen que ver con cuestiones como las desigualdades sociales, las relaciones desiguales de poder, la centralización del poder en manos de unos pocos y en cómo los gobiernos hacen lo que mandan las grandes empresas y el capital.”
Del mismo modo, el responsable de ELA ha destacado que de la cumbre oficial solo van a salir falsas soluciones. “Lo que pretenden es pintar de verde la casa, pero sin arreglar nada, cuando lo que hay que hacer es cambiarlo todo, incluidos los cimientos del actual sistema de producción, distribución y consumo”.
Por último, Noval ha indicado que los próximos días se va a avanzar en lo que se refiere a las alternativas, y a una agenda de movilizaciones futura. En este sentido ha destacado las distintas movilizaciones que van a tener hoy día 20, tanto en Río como en Euskal Herria y en el resto del mundo.