RESIDUOS
Las bolitas de plástico vertidas en el Cantábrico son sólo la punta del iceberg

Antes de que el barco que transportaba las bolitas de plástico en aguas portuguesas perdiera su carga, en el Cantábrico ya había miles de toneladas de plástico y residuos, y hasta ahora no nos hemos preocupado demasiado.
Parece que sólo cuando se produce una catástrofe de este tamaño, y se oye una y otra vez en los medios, nos preocupamos de que haya miles de toneladas de residuos en el mar, o quizá ni de eso, solo tememos que las bolitas de plástico lleguen a nuestras playas. ¿Pero hasta ahora no nos hemos dado cuenta de que a nuestras playas llegan diariamente kilos de residuos y plásticos?
La actitud del Gobierno de Galicia es absolutamente denunciable. Ocultar la información ante un hecho de este calibre y después negar lo que es evidente siempre ha sido su estilo. Nos recuerda lo que pasó con el Prestige. Pero los miles de barcos que transportan mercancías peligrosas y contaminantes a través de los océanos no son responsabilidad del gobierno gallego. Ni las miles de toneladas de plástico que hay en el mar, ni de los residuos que llegan reiteradamente a nuestras costas. El problema de los residuos es global y es consecuencia de nuestro modelo de producción y consumo. El transporte marítimo y los problemas que acarrea también son consecuencia de este modelo.
Por lo tanto, no miremos al otro lado, porque también es nuestra responsabilidad.