¡Sí a la recogida de basura Puerta a Puerta! (opinión)
El sistema de recogida de basura puerta a puerta ha tenido gran resonancia mediática en las últimas semanas. Además de la habitual recogida selectiva de vidrio, recipientes/plástico y papel, también se recoge la materia orgánica, que servirá para la elaboración de compost. Los residuos domésticos se recogen individualmente, y en la calle no habrá más contenedores, excepto los de emergencias. Este sistema de recogida se puso en marcha en Usurbil en marzo de 2009.
Las tasas de reciclaje de este nuevo sistema son altas, superan el 80%, y efectivas desde el primer día. La mayor parte de la materia orgánica se convierte en compost reutilizable. En las localidades donde opera el sistema de los cuatro contenedores las tasas de reciclaje son del 28%. Existe un tercer sistema, de 5 contenedores, con uno específico de materia orgánica. Pero no resulta eficaz, ya que no se alcanza un 35% de reciclaje. El sistema de 5 contenedores es de participación voluntaria; y ahí reside el problema, la gente no está lo suficientemente concienciada. El sistema de puerta a puerta, sin embargo, es de participación obligatoria; y por eso se obtienen tan buenos resultados.
Los contrarios a este sistema alegan que el reciclaje es una imposición, pero ese argumento es una distorsión de la realidad. La basura es responsabilidad de quien la genera; y el reciclaje debe ser obligatorio, no opcional. Si no se recicla, se seguirán construyendo incineradoras y seguirán siendo necesarios los tan poco saludables vertederos.
Por otra parte, este sistema de recogida genera empleo. Si el sistema de recogida puerta a puerta se extendiera a toda Gipuzkoa, a los puestos de trabajo actualmente existentes se añadirían previsiblemente otros 477.
Además a los que hablan de imposición cabe replicarles que en Usurbil se hizo una consulta vinculante, para que los vecinos eligieran el sistema de recogida. Es de subrayar realmente que en este caso la decisión se ha tomado mediante consulta vinculante, a diferencia de lo sucedido en otros proyectos para los que no se ha consultado a la población, tal es el caso de las incineradoras o del TAV. Por todo ello, ELA pidió el voto favorable al sistema de puerta a puerta.
El resultado de la consulta ha sido admirable. Con una participación muy alta (72%), superior a la que se alcanza en elecciones municipales, el 97% se ha mostrado partidario de recoger por separado la materia orgánica, mostrando así una gran responsabilidad respecto a la basura generada. Y el que el 55% haya elegido el sistema de puerta a puerta, a pesar de todas las falsedades vertidas en su contra, demuestra que es el sistema preferido por los vecinos.
Aparte de ser el sistema preferido por la población, es el más eficiente. Y se constituye en la alternativa a las incineradoras. Con el sistema de puerta a puerta sólo queda un resto de basura del 20%, que también es limpio. Sin embargo, hay que ir reduciendo ese resto hasta convertirlo en “zero waste”, y llegar a un reciclaje del 100%, sin generación de basura. En el caso de las incineradoras, después de la incineración queda un volumen de ceniza del 30%, mayor que los restos del sistema puerta a puerta; y esas cenizas, que pueden ser tóxicas, acaban en un vertedero.
ELA opina que los argumentos expuestos demuestran suficientemente la inutilidad de las incineradoras, por lo que suscribe, junto a otros agentes políticos y sociales, el "Pacto de Usurbil" en demanda de una demora de 6 años para la construcción de la incineradora de Zubieta; de ese modo se contaría con el tiempo necesario para la implantación del sistema alternativo de recogida de basura y para la definitiva paralización de los proyectos de incineradoras, tan dañinas para la salud y el medio ambiente.
ELA exige la extensión del sistema de recogida de basura puerta a puerta a toda Euskal Herria, por razones de salud y de medioambiente.