Situación del cambio climático en Navarra

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Si analizamos los datos por sectores, la evolución es preocupante:

No hay reducciones significativas en los sectores. Entre las actividades que más emisiones emiten están la electricidad exportada (25%), la industria (24%) y el transporte (20%).

Al ser el transporte y la industria los sectores económicos con mayores emisiones, sus emisiones se han mantenido en las tres últimas décadas. La energía exportada, aunque no se trate de un sector económico, también debe ser mencionada. Las emisiones de las centrales de ciclo combinado de Castejón, que se pusieron en marcha hace 20 años, son enormes, siendo la infraestructura que más emite en Navarra. Sus emisiones han llegado a ser equiparables a todo el sector del transporte o al de la industria.

Sin embargo, si analizamos lo que ha ocurrido desde la firma del Acuerdo de París (2015) y la adopción de importantes compromisos de reducción, vemos que la situación es aún más grave:

El sector del transporte ha experimentado un continuo auge en los últimos años. El transporte está basado principalmente en el uso del petróleo y el modelo fósil de movilidad no ha cambiado en los últimos 10 años. Por otra parte, mientras que las emisiones correspondientes al consumo de energía en Navarra han ido descendiendo, las emisiones correspondientes a la electricidad generada con gas natural en las centrales de ciclo combinado de Castejón han aumentado de manera exponencial, con un aumento del 964,9% entre 2016-2022.

Según el Acuerdo de París, los países de la Unión Europea deben reducir sus emisiones en un 30% para 2030 sobre la base de las emisiones de 1990. En Navarra, sin embargo, las emisiones han aumentado un 21,9% desde la firma de los compromisos de París. Los datos muestran que no se han tomado medidas eficaces. No hace falta decir que los compromisos de reducción del 30% para 2030 no se cumplirán, teniendo a día de hoy un incremento del 71% desde 1990.