ELA y LAB rechazan la presencia de los reyes en Navarra

A lo largo del día de hoy los reyes españoles han visitado el centro de Día Ramón y Cajal de Aspace en Zizur Menor. En este contexto, los sindicatos ELA y LAB, expresamos nuestro más absoluto rechazo a la monarquía, y destacan que no son bien recibidos en Navarra, motivo por el que hemos realizado una concentración frente al centro de trabajo.
La monarquía española está utilizando la crisis sanitaria y de emergencia social que estamos sufriendo para llevar a cabo una operación de lavado de cara tras el enésimo caso de corrupción borbónica. Algo inaceptable y ruin.
Ni los trabajadores y trabajadoras, ni las personas usuarias necesitamos la visita de reyes ni reinas corruptas. Necesitamos medios humanos y materiales suficientes y adecuados, y necesitamos unas condiciones laborales dignas para poder prestar un servicio de calidad que garantice una vida digna a las personas usuarias. Estas son las verdaderas necesidades y el reto que tenemos.
No es casualidad que cuando los reyes españoles vienen a Navarra lo hagan invitados por los empresarios navarros o aprovechen la ocasión para visitar alguna empresa. Los unos quieren súbditos y los otros esclavos. En esta tierra sabemos muy bien qué supone esta alianza entre el capital y la monarquía: falta de derechos y libertades, precariedad y mucha pobreza. Dicho de otro modo, régimen del 78 en estado puro: represión, privilegios para las élites, dietas, comisiones, pagos a empresarios a cambio de otros favores…
La llamada transición política española –que califican de modélica– implicó la restauración monárquica, ordenada por Franco y consumada dos días después de su muerte. Así, la inviolabilidad de los borbones sancionada por la constitución española, unida a cuatro décadas de nefasta propaganda pro-monárquica, ha permitido su enriquecimiento, corrupción, escándalos que le afectan, o la relación de los borbones con empresarios sin escrúpulos y sangrientos dictadores en el ámbito internacional. Creemos que este sistema y régimen del 78 no puede pretender seguir haciendo oídos sordos a la urgente necesidad de regeneración y salida democrática.
La sociedad navarra nunca ha podido decidir su Estatuto de Autonomía, el llamado Amejoramiento del Fuero para mantener “todo atado y bien atado” y varias generaciones sufren una constitución española que tampoco votaron. Es hora por tanto de decidir nuestro futuro.