El 25 de mayo, concentración: “El Gobierno de Navarra recupera los criterios antidemocráticos del Régimen para promocionar a UGT y CCOO”

24/05/2021
ELA denuncia que el Gobierno de Navarra ha recuperado el criterio antidemocrático de la época de Miguel Sanz y Yolanda Barcina para promocionar a UGT y CCOO, y ya lo ha puesto en práctica con la Junta de Contratación Pública y con la Ley Foral 18/2019 sobre el deporte profesional, entre otras iniciativas. En ese sentido, resulta especialmente grave que en la Junta de Contratación Pública solo se reconozcan como miembros a UGT y CCOO (Decreto Foral 74/2019). Hay que recordar que en 2014, ELA promovió una Iniciativa Legislatura Popular para la modificación de la Ley de Contratos Públicos en la que se recogieron 14.635 firmas, y que dicha Junta proviene de aquella iniciativa. Para conseguir que el Gobierno de Navarra modifique su postura antidemocrática, el sindicato ELA va a realizar una concentración de delegados y delegadas el próximo 25 de mayo a las 12:30 frente al Palacio de Navarra. Asimismo también va a solicitar una reunión a cada uno de los partidos que componen el Gobierno de Navarra. En concreto a Elma Sainz (PSN), consejera de Economía y Hacienda y con la competencia sobre la Junta de Contratación; a Jose Mari Aierdi (Geroa Bai), vicepresidente del Gobierno; y a Eduardo Santos (Podemos), consejero de Políticas Migratorias y Justicia.

Las dos normas del Gobierno de Navarra mencionadas anteriormente no son cuestiones aisladas, sino que forman parte de una decisión meditada y consciente, que tiene su continuidad en la Mesa de la Automoción, o en la Mesa de la Formación y el Talento; sin ninguna base jurídica, el Gobierno de Navarra ha decidido que solo formen parte de ellas UGT y CCOO.

Como se recordará, durante mucho tiempo, el llamado diálogo social ha servido para financiar con dinero público a UGT, CCOO y la CEN. Para ello, los Gobiernos de UPN y PSN consolidaron un entramado opaco repleto de diferentes mesas y foros: a través de diferentes convenios, llegaron a pagar con dinero público el salario de más de 120 personas de UGT y CCOO, además de abonar gastos de de luz, calefacción... Los informes de Comptos y la presión de ELA contribuyeron a que en la anterior legislatura se eliminasen esos convenios.

Esa misma estrategia de recuperar los criterios antidemocráticos del Régimen fue la que en junio de 2020 llevó al Gobierno de Navarra a liquidar la mesa de crisis de la pandemia. Esa mesa estaba compuesta por UGT, CCOO, ELA y LAB, y en ella se debatía el complemento para los ERTE. El Gobierno de Chivite, sin contestar a la propuesta de ELA, decidió llevar el tema al Consejo de Diálogo Social (UGT y CCOO). Lo sucedido con ese acuerdo de complemento de los ERTE es un buen ejemplo de la realidad del diálogo social, puesto que se le dio una enorme propaganda, asegurando que iba a beneficiar a 11.000 personas, y un año después se han acogido solamente 600 personas.

La vuelta a los criterios antidemocráticos del Régimen es una cuestión inaceptable, y más teniendo en cuenta que hace ya varios años que, como consecuencia de su pérdida de apoyos entre los trabajadores y trabajadoras de Navarra, UGT y CCOO ya no alcanzan el 50% de la representatividad.