El desempleo ha subido un 13,8% el último trimestre en Navarra
El número de personas ocupadas apenas ha aumentado en 500 respecto al trimestre anterior. Los datos muestran que prácticamente el número de personas ocupadas está estancado desde el segundo trimestre de 2022. En el cómputo interanual, se aprecia una ligera destrucción de empleo entre las mujeres (-1.200); mientras que entre los hombres hay un aumento de 6.300 ocupados.
Si reparamos a la temporalidad de los contratos, vemos que en el último trimestre las personas con este tipo de contrato han caído en 6.300, mientras que las de duración indefinida han aumentado en 7.700. De modo que la tasa de temporalidad se ha reducido situándose en el 18,5%. En este aspecto, encontramos que las mujeres sufren una mayor precariedad, ya que la tasa de temporalidad asciende en su caso al 23,6%. A pesar de que la temporalidad se está reduciendo, la tasa en el sector público sigue siendo muy alta, y alcanza el 35,5%. Además, cabe recalcar que seguimos situándonos por encima de la tasa de la UE.
La jornada parcial involuntaria es otra cuestión que afecta en mayor medida a las mujeres. Casi una de cada cuatro mujeres (22,8%) tiene un contrato a jornada parcial, mientras que entre los hombres la tasa se sitúa en el 5,8%. Esto es otra muestra de la discriminación que las mujeres siguen sufriendo en el ámbito laboral.
En cuanto al desempleo, el año 2022 ha terminado con 32.900 personas desempleadas, lo que supone un ascenso de 4.000 personas respecto al trimestre anterior, en términos relativos supone un aumento del 13,8%. Entre las mujeres se ha producido un aumento importante del desempleo el último año, con un aumento de 3.600 personas, así la tasa de desempleo de las mujeres se ha situado en el 10,6%, cuando hace un año estaba en el 8,4%. Estas cifras contrastan con los datos de los hombres, que se ha visto reducido su tasa en 1,6 puntos, del 11,3% al 9,7%. La tasa general de desempleo sube hasta el 10,1%, mucho mayor que la de la UE, que se sitúa en el 6%. Por otra parte, cabe recalcar que la tasa de desempleo entre las personas jóvenes sigue siendo muy alta, del 27,8%.
Son datos negativos, ya que que el desempleo ha subido y la ocupación no. No solo la comparación intertrimestral muestra malos datos, sino que en la comparación interanual observamos también hay una evolución negativa. Todo ello ocurre, a pesar de que la economía ha crecido por encima del 4% en 2022. En cuanto al año 2023, sabemos que las previsiones de crecimiento son peores, de modo que somos pesimistas con lo que puede ocurrir en el empleo durante este año. Además, recordemos que el encarecimiento del costo de la vida y la no actualización de los salarios con el IPC han llevado a un empobrecimiento de la clase trabajadora. Por ello, es necesario la organización y la movilización para luchar por una mejora de las condiciones materiales.