ELA exige al Gobierno de Navarra que desarrolle una normativa para garantizar y normalizar el euskara en la Administración

06/05/2021
El Gobierno de Chivite renunció a recurrir la anulación del Decreto Foral que regulaba el uso del euskara en la Administración y tampoco ha dictado ninguna norma que lo regule posteriormente. La forma de actuar del Gobierno provoca que en las oposiciones se valore el conocimiento del alemán en la zona mixta y no vascófona y no el euskara, tal y como va a suceder en la convocatoria de 114 plazas médicos de atención primaria y de urgencias.

El tratamiento que da el Gobierno del PSN, Geroa Bai y Podemos al euskara cada vez se aleja más de cualquier trato lingüístico normalizado y democratizado, y no garantiza los derechos lingüísticos de muchos navarros y navarras.

En noviembre de 2017, el anterior Gobierno de Navarra aprobó un Decreto Foral para regular el uso del euskara en la Administración, que regulaba, entre otras cuestiones, su valoración en las OPEs. ELA fue el único sindicato que apoyó dicho Decreto.

Este Decreto Foral fue recurrido por UGT, Afapna, Sindicato Médico y Satse, y el Tribunal Superior de Navarra anuló la valoración del euskara como mérito para cualquier puesto en la Administración en las zonas mixta y no vascófona, entre otras cuestiones.

Ante esta sentencia, el actual Gobierno de Navarra decidió no recurrir la anulación, dejando una normativa que no regula (y por tanto no exige) la valoración del euskara en las OPE de la Administración. Ahora, se escuda en que la normativa no exige esta valoración para dejar fuera de las OPE el euskara, cuando ha sido una situación creada por su propia inacción, totalmente consciente. Esta situación provoca que en las oposiciones se valore el conocimiento del alemán en la zona mixta y no vascófona y no el euskara, tal y como va a suceder en la convocatoria de 114 plazas de personal médico de atención primaria y de urgencias.

ELA exige al Gobierno que desarrolle una normativa que garantice la normalización y la valoración del euskara en la Administración. Todo ello con la convicción de que una nueva Ley del Euskara que sustituya a la de 1986 es imprescindible. Solo un nuevo texto con rango de ley foral que elimine la zonificación podrá garantizar los derechos de las personas vascoparlantes.