#28DeAbril: “La mayor temporalidad, parcialidad o pobreza que sufren las mujeres tienen impacto en su salud y exigen un enfoque diferente”
ELA ha conmemorado el Día Internacional de la Seguridad y la Salud en el trabajo de 2022 en un doble formato. Primero, con una jornada formativa de carácter interno, en la Alhóndiga de Bilbao, en la que han tomado parte unos 400 delegados y delegadas del sindicato. Posteriormente, ha tenido lugar una manifestación con la mayoría sindical desde Moyúa hasta la sede del Gobierno Vasco, en Gran Vía 85, donde han llevado a cabo un homenaje floral a las personas fallecidas en accidente laboral a lo largo del año pasado.
En su intervención durante la jornada formativa, Leire Heredia, del Departamento de Seguridad y Salud Laboral, reivindicó la necesidad de hacer una lectura de género de la seguridad y la salud en el trabajo para acabar con los riesgos que específicamente sufren las mujeres. “La división sexual del trabajo en el mercado laboral actual hace que se creen sectores masculinizados y feminizados, donde los riesgos son del todo diferentes y se tratan de manera distinta. Los datos demuestran que hombres y mujeres no sufren las mismas patologías ni están sujetos a los riesgos por igual. La mayor temporalidad, parcialidad o pobreza que sufren las mujeres también tienen impacto en su salud y requiere de estudios propios”.
En este sentido, afirmó que “los trastornos músculo-esqueléticos provocados por posturas forzadas, movimientos repetitivos y/o manipulación manual de cargas; los riesgos químicos y biológicos relacionados con la exposición en sectores como limpieza, sanitario y socio-sanitario; los riesgos psicosociales derivados de una mala organización en el trabajo, que pueden derivar en abusos de autoridad, conductas inapropiadas, entre otros, o la violencia contra las mujeres en el trabajo, violencia física, psicológica, sexual o por razón de sexo, son riesgos que sufren las mujeres y que hay que erradicar de los centros de trabajo”.
Por su parte, Peio Igeregi, responsable del Area de Salud Laboral de ELA, tras recordar a las personas fallecidas en accidente laboral, insistió en la idea de que la precariedad mata. “El miedo a perder el contrato, la falta de formación, la subcontratación, en fin, los empresarios que precarizan nuestra vida, mata, nos mata”, denunció.
De ahí, entre otras razones, la campaña contra la precariedad que está llevando a cabo el sindicato, porque “los 541.600 trabajos precarios que calculamos existen en Hego Euskal Herria suponen un riesgo de muerte”. “Llevar a cabo esta campaña es situar directa e indirectamente la salud en el centro y, al mismo tiempo, el dar prioridad a la precariedad que sufren especialmente las mujeres es, también, combatir las brechas de género”, afirmó este responsable sindical.
En otro momento de su intervención, Igeregi recalcó que morir trabajando no es cuestión de mala suerte sino de la elección empresarial de precarizar la vida de la clase trabajadora y de una clase política que está al servicio del poder económico. “Hoy veremos y escucharemos mucho ejercicio de hipocresía. Nos hablarán sobre la importancia de la prevención, la colaboración, la implicación pública y otras mentiras. Palabras vacías. Llevamos años pidiendo duplicar el número de inspectores, para situarnos en la media europea, pero no lo hacen, no hay voluntad política”, denunció.
“Por eso, -concluyó- lo que no van a hacer los políticos, lo que no quieren los empresarios, lo tenemos que hacer nosotros. Tenemos que hacer aflorar toda la precariedad existente en las empresas y sectores y enfrentarnos a los explotadores. Para ello, la mejor aportación que podemos hacer al volver mañana a nuestro puesto de trabajo es completar un mapa de precariedad”, pidió a los presentes.
En este acto interno también tomaron parte delegadas de distintos sectores feminizados que relataron su experiencia sobre la invisibilidad de los problemas de salud laboral específicos y denunciaron situación de acoso que muchas empresas pretenden ocultar.
Manifestación conjunta
Posteriormente, los delegados y delegadas de ELA se dirigieron hasta la plaza de Moyúa, en Bilbao, donde se juntaron con la representación de los sindicatos LAB, ESK, STEILAS, Etxalde e Hiru. Todos juntos se dirigieron en manifestación hasta la sede del Gobierno Vasco donde realizaron un acto en homenaje a los fallecidos en accidente de trabajo a lo largo de 2021.
