“Los acuerdos sin huelga son posibles porque hacemos muchas huelgas”

-ELA es el sindicato que más convenios y acuerdos alcanza en Euskal Herria. Más de 300 al año.

-En lo que a nosotros se refiere, se ha construido el mito de que no llegamos a acuerdos, y los datos demuestran que eso es falso. Lo que ocurre es que somos exigentes, no firmamos cualquier cosa. El año pasado el mayor número de acuerdos lo cerramos nosotros, pero el mayor número de huelgas también las convocamos nosotros.

El dato es coherente con nuestra acción sindical. Nosotros estamos en las empresas, no nos conformamos con lo que nos dan, movilizamos a los trabajadores y las trabajadoras y el número de acuerdos es consecuencia de ello.

-Acabamos de lanzar el anuario de victorias. ¿Por qué es importante celebrarlo?

-Para empezar, porque da mérito a lo que han conseguido los y las que han estado en la lucha, y sirve para construir la identidad. Pero también porque da perspectiva a otros y a otras. Porque se demuestra que a través de la lucha y la organización es posible mejorar las condiciones laborales. Es importante para uno mismo celebrarlo, pero también lo es para demostrar a los demás trabajadores y trabajadoras que la lucha merece la pena.

-En el anuario aparece un dato llamativo: el 37% de los casos tramitados en el Ámbito Laboral de la CAPV corresponden a ELA. De media, los abogados y abogadas del sindicato gestionan 9.250 expedientes al año.

-La legislación no está diseñada para los trabajadores y las trabajadoras, está para garantizar los intereses de las empresas. Dicho esto, nosotros tenemos Servicios Jurídicos para la lucha sindical, sabiendo que es el marco que nos han impuesto. El año pasado los Servicios Jurídicos hicieron un trabajo muy importante para garantizar el derecho a la huelga, porque las empresas tienen recursos para limitar el derecho a la huelga y el Gobierno Vasco y el Gobierno de Navarra no hacen nada.

-A la hora de preparar las negociaciones, ¿hay que tener en mente que pueden acabar en los juzgados?

-La estrategia jurídica forma parte inexorable de la negociación. Pero tenemos claro que, en la medida de lo posible, tenemos que huir de los juzgados. Por ejemplo, cuando vamos a conseguir mejoras en un convenio, nosotros y nosotras no tenemos en mente ganar en los juzgados. Pero cuando entra un expediente de regulación, acaba en el juzgado. También ocurre muchas veces que en los juzgados conseguimos algo y eso puede utilizarse para activar la negociación colectiva.

-En el último año ha sido evidente la actitud del Gobierno Vasco a favor de las mediaciones. ¿Qué opinión tienes sobre ellas?

-El Gobierno Vasco ha apostado por las empresas en todas las mediaciones. No es imparcial. Su único objetivo es acabar con el conflicto, situando el final fuera del control de los trabajadores y las trabajadoras. Les quitan la perspectiva porque la lucha parece que no vale y pone la solución en otra parte. La patronal no nos da lo que nos corresponde porque no quiere, no porque sea injusta.

-Las empresas tienen mecanismos para no aplicar los convenios y Madrid ha abogado también en la última década por limitar la ultraactividad de los convenios. ¿Cuál es hoy la situación y el valor de la negociación colectiva?

-La negociación colectiva es la organización de los trabajadores y las trabajadoras para conseguir lo que los/as empresarios/as no quieren darles. Por eso la patronal está intentando bloquear la negociación de forma generalizada. Yo no sé si la negociación colectiva está sana o enferma, pero sé que nosotros y nosotras estamos sanos y sanas. Dado que el objetivo de la ley es mantener el status quo, la negociación colectiva siempre irá en contra de la ley. Y las mejoras en las leyes han llegado como consecuencia de la lucha sindical, no al revés.

-Poco más de tres años después, la huelga de Novaltia terminó a finales de marzo con un buen acuerdo. ¿Qué lectura haces de ello?

-Es duro decirle a quien te paga que no aceptas las condiciones que te quiere imponer. Y si les decimos a los trabajadores y las trabajadoras que tendrán que hacer casi 1.500 jornadas de huelga para mejorar sus condiciones laborales, no conseguiremos movilizaciones. Pero gracias a haberlo hecho en Novaltia, en muchos lugares no tendrán que hacer ni una jornada de huelga. Los acuerdos sin huelga son posibles porque hacemos muchas huelgas. La huelga no es secundaria. La posibilidad de huelga siempre está sobre la mesa. La huelga de Novaltia ha hecho mucha pedagogía entre los y las empresarios/as.

-¿Prevés para este año tantas movilizaciones como el año pasado?

-No sé cómo acabará el año, pero sé que lo que logremos este año será también gracias a las huelgas del año pasado. En 2020 el número de huelgas bajó, debido a la pandemia. Pero todas las huelgas realizadas en 2019 también surtieron efecto. Llegar a acuerdos sin huelga es posible porque la posibilidad de huelga está sobre la mesa.