A reforzar nuestra mayoría #ZurekinGoaz #Landeia229

03/08/2018
Igor Eizagirre, Maricruz Elkoro y Unai Martínez, responsables de las tres federaciones profesionales, se muestran convencidos de que la clase trabajadora volverá a respaldar masivamente en las urnas el modelo sindical de nuestro sindicato

Unai Martínez, secretario general de Industria eta Eraikuntza

“No nos ponemos techo”

Unai Martínez, secretario general de la Industria eta Eraikuntza, se muestra ilusionado y convencido de que el sindicato va a superar su altísima representatividad. “Estamos por encima del 40% en la CAPV, más que duplicando al segundo sindicato, y somos el primer sindicato en el Metal de Navarra, dato que tiene un enorme valor. El reto es superar esas cifras, sin ponernos techo, y eso que lo obtenido tiene un mérito enorme”.

En pleno proceso de elaboración de candidaturas, Martínez insiste en la necesidad de renovación generacional y de género en el Metal. “Uno de nuestros retos es feminizar nuestras candidaturas. No podemos seguir siendo una federación eminentemente masculina. Tenemos que llegar a las mujeres trabajadoras de nuestros sectores y animarles a trabajar en la primera línea de sus empresas; su visión de género es muy necesaria. Otro objetivo es mejorar la coordinación entre empresas principales y subcontratadas, y la confección de candidaturas es un buen punto de partida para ello”.

Otro elemento clave será, en opinión de Unai Martínez, la capacidad de llegar a todas las empresas, independientemente de su tamaño. “En la pequeña empresa el sindicato es tan necesario como en la grande”.

Haciendo balance del trabajo de ELA durante los últimos años, Martínez recuerda cómo las reformas de Zapatero y Rajoy pusieron patas arriba el modelo tradicional de negociación colectiva y cómo ELA. en solitario. ha realizado una labor titánica sector a sector, empresa a empresa, para explicar las consecuencias de estas reformas y negociar convenios de empresa blindados. “ELA nunca ha renunciado a la negociación colectiva sectorial, pero lo que no hacemos es decir que tiene el mismo valor que tenía. ELA asume su compromiso de ser un instrumento en cada centro de trabajo, sea del tamaño que sea, para que los empresarios estén obligados a cumplir lo acordado. Fruto de ese compromiso, nuestras secciones sindicales firman convenios que dejan fuera la reforma laboral. Y el mérito es de nuestra militancia”.

Y si de méritos se trata, Martínez no quiere olvidar a la gente de la Construcción, que con su ingente trabajo de patear los tajos ha visibilizado la situación de explotación que vive el sector, tanto en la obra privada como en la pública. “Estoy convencido de que ese trabajo y esa denuncia continua va a ser avalada. En las elecciones sindicales son los trabajadores y trabajadoras quienes deciden quiénes quieren que les representen. No todos los sindicatos somos iguales. No es lo mismo que ELA sea el sindicato mayoritario a que no lo sea. Quien quiera cambiar las cosas, quien esté dispuesta a pelear por ello, sabe que ELA es su sindicato”.

 

Igor Eizagirre, secretario general de Gizalan

“Somos la voz de las personas precarias”

Igor Izagirre afronta con optimismo este proceso electoral en el que espera que el sindicato mantenga –e, incluso, mejore– su altísima representación en todos los sectores y territorios. “Las y los trabajadores han visto claramente a lo largo de estos años quiénes hemos estado en los centros de trabajo explicando la coyuntura, ofreciendo propuestas y llamando a la movilización contra los recortes y la vulneración de nuestro derecho a la negociación colectiva. Otros, por el contrario han intentado quitar importancia a las políticas antisociales y han firmado acuerdos vacíos de contenido. Los resultados electorales serán el mejor test para legitimar la acción sindical de cada cual”.

Sin embargo, unos buenos resultados electorales no se explican exclusivamente por el buen trabajo realizado. Por eso, Izagirre hace un llamamiento a mantener la tensión organizativa y militante. “Nuestra militancia ha hecho un gran trabajo durante estos años, pero hay que seguir en la línea. Hay que pelear cada voto, cada delegado/a, cada centro de trabajo... Toca echar el resto. La defensa de unos servicios públicos de calidad bien merece el esfuerzo”.

Cara a este nuevo proceso electoral, Izagirre da importancia, también, a la elaboración de candidaturas equilibradas que tengan en cuenta el relevo generacional y la perspectiva de género. “Tenemos que seguir con nuestra gente referente y buscar nuevos referentes que reflejen la realidad de cada sector y garanticen el futuro del sindicato”.

Por sectores, Eizagirre destaca que “ya somos el primer sindicato en la enseñanza, y nuestro objetivo es mejorar la representatividad en la pública”. En el sector sociosanitario, tras destacar que ELA ha subido más de dos puntos en representatividad, situándose por encima del 45%, resalta que el sindicato se ha convertido en la voz de las personas precarias. En Administración foral y local, el objetivo es ganar en los ayuntamientos de las tres capitales de la CAPV y avanzar en las tres diputaciones, “porque ese será el camino para activar la negociación colectiva, mejorar la calidad del empleo y las condiciones laborales”.

Por lo que se refiere a Navarra, “el objetivo es consolidarnos como segundo sindicato, representatividad lograda en el anterior periodo electoral y seguir avanzado sector a sector. En cuanto al sector sociosanitario, donde ya somos también el primer sindicato, continuaremos en nuestra línea de lucha contra la precariedad”.

 

Maricruz Elkoro, secretaria general de Zerbitzuak

“Elecciones contra la precariedad”

Al ser cuestionada sobre los objetivos de Zerbitzuak, Maricruz Elkoro incide en que en su federación el periodo concentrado es cada vez menos concentrado, y que se han hecho y se siguen haciendo elecciones constantemente. “Preparar elecciones sindicales es algo sistemático, es parte del quehacer diario”. Eso se explica, en gran parte, por el auge de las empresas de servicios, en las que la tónica dominante es la precariedad de las plantillas. “El primer paso para ir al conflicto es tener representación sindical. De ahí se deriva la afiliación, la organización, y cuando hay condiciones, el conflicto. En estos cuatro años no hemos parado de hacer elecciones y combatir la precariedad”.

“En muchos casos no es el liberado sindical el que llega a una empresa y tiene que buscar un contacto, convencerle de la necesidad de tener representación sindical, de afiliarse... Ahora, por la referencialidad que ELA supone de lucha y dignificación de condiciones laborales, es la gente la que viene al local y dice que está dispuesta a luchar. A partir de ahí se pone en marcha toda la maquinaria”.

No es casualidad, subraya Elkoro, que tras la lucha y victoria sindical del personal subcontratado del Museo Bellas Artes, luego viniera el turno de los del Guggenheim, Euskalduna o Azkuna Zentroa. Lo mismo está ocurriendo en los Polideportivos municipales y entre las camareras de pisos. “Cuando un colectivo consigue una victoria marca un referente que anima a creer que la victoria es posible”.

Así las cosas, Elkoro mira con optimismo el futuro. “La tendencia es claramente al alza; por ejemplo, el crecimiento en Araba está siendo espectacular. Y no sólo en cuanto a resultados electorales, también en afiliación”.