Amplio seguimiento de la primera jornada de huelga en el Banco Sabadell

El expediente de regulación de empleo presentado por la empresa pretende despedir a 1.730 trabajadores y trabajadoras a nivel estatal (1.450 de la red de oficinas, 35 de las direcciones territoriales y 245 de los servicios centrales), pero afecta a toda la plantilla. En el caso de Euskal Herria puede afectar a 82 personas. El número era mayor al inicio del periodo de consultas y se prevé que disminuya progresivamente. Pero para nosotros no es un logro. Porque el objetivo es la supresión del ERE para que la plantilla no se reduzca, y deben paralizarse las medidas que puedan acompaña a esta medida, como ha ocurrido en los últimos expedientes de regulación de empleo de otras entidades financieras. Además, el personal está preocupado por la falta de mecanismos para garantizar la voluntariedad y la aplicación movilidad geográfica. La empresa está nerviosa. Prueba de ello son las llamadas telefónicas y los correos electrónicos que se han dado con carácter previo a la huelga, sondeando el seguimiento de ésta. La plantilla ha percibido estos “sondeos previos” como una medida coaccionadora para evitar que la huelga sea un éxito. ELA ha puesto en conocimiento de la empresa que este tipo de acciones no tienen amparo alguno, y que no es posible la sustitución de personas huelguistas. En caso de que tengamos constancia de que se sigue coaccionando o de que se procede a la sustitución de trabajadores/as en huelga, se procederá a la correspondiente denuncia en las instancias que correspondan. El viernes 8 volveremos a salir a la calle para plantarnos ante este despropósito y continuar reivindicando el no al ERE. Si la empresa no da su brazo a torcer, continuaremos con las movilizaciones