SALUD LABORAL
Concentración para denunciar la muerte laboral en Talleres Aratz
Con esta muerte serían al menos 31 las personas trabajadoras fallecidas por accidente laboral en Hego Euskal Herria, un dato realmente desolador. Más terrible aún si tenemos en cuenta que 5 de las 31 personas fallecidas murieron por un atrapamiento.
La siniestralidad laboral no son hechos aleatorios y siempre tienen una característica común: la precarización del mercado de trabajo y los continuos incumplimientos de las normas de prevención. La patronal antepone la producción y los beneficios económicos a la salud y seguridad de las y los trabajadores, lo que inevitablemente repercute negativamente en las condiciones de trabajo: ritmos de trabajo rápidos, enormes cargas de trabajo, falta de medidas de protección y un largo etcétera. Estos incumplimientos, sin embargo, no serían posibles sin el papel pasivo que juegan las instituciones públicas: miran para otro lado mientras las empresas tienen este tipo de comportamientos y por si fuera poco, la inversión pública es nula para el control de los incumplimientos de la normativa preventiva.
Más que nunca hacen falta políticas que sitúen en el centro la seguridad y la salud de las y los trabajadores. Todos las personas trabajadoras deberían garantizar la protección de su vida en tanto sea un derecho fundamental. Por todo ello, ELA pide tanto a la patronal como a las instituciones públicas que, más pronto que tarde, tomen las decisiones tan necesarias y prioricen la salud y la seguridad de la clase trabajadora por encima de todo.