El Departamento de Educación ha decidido dejar IRALE en los huesos

01/03/2010
El Departamento de Educación de la CAPV ha comunicado –desoyendo las voces críticas– las medidas que va a adoptar en breve respecto al programa para la capacitación idiomática en euskara del profesorado, IRALE.

Cara al curso que viene, el Departamento por el momento sólo va a efectuar convocatorias para los cursos U (anuales cara a la obtención del PL1 y del PL2,) y para el curso R 300 cuyo cupo descenderá de 350 a 300 plazas y sólo se realizará en un único turno en el primer trimestre, quedando, por ello, algo más que en el aire la participación del personal sustituto en esta modalidad de curso.

 Por lo visto, el resto de modalidades serán ofertadas, en su caso, en septiembre, una vez culmine (?) la negociación del nuevo convenio.

Desde luego, esta minimalista propuesta que ahora realiza este Departamento de Educación concuerda con otra serie de medidas restrictivas y regresivas que respecto al Euskara ya ha adoptado o ha anunciado. Coherencia no le falta. De hecho, se conocen ya el sentido y alcance del resto de modificaciones que quiere realizar en IRALE. Los recortes de calado que, sin evaluación previa, pretende realizar indican a las claras que la formación lingüística del profesorado, en lo que hace al euskara al menos, está lejos de  ser una prioridad en su agenda.

ELA rechaza con rotundidad estas medidas porque suponen un paso atrás en  materia de capacitación lingüística del profesorado y, por ello mismo, un deterioro importante del sistema educativo de la CAPV.

Por ello, llama especialmente la atención la coincidencia plena en objetivos y la cobertura que le ofrecen en esta materia algunos sindicatos, cuando esta propuesta incumple precisamente lo dispuesto en el acuerdo laboral, vigente hoy en día, del que son firmantes.

En este contexto, resulta también denunciable y muy revelador el hecho de que la más grande reconversión sufrida por el programa IRALE se pretenda solventar por parte de este Departamento –ésa es, al menos, su intención– con un par de reuniones de una comisión (HINOEBA) cuya función es esencialmente técnica y sin un análisis previo que justifique esta decisión. Con la rápida celebración de estas dos reuniones, el Departamento ni ha buscado abrir el necesario debate en una materia como ésta, ni recoger propuestas y opiniones de otros, sino la simple comunicación de una decisión ya adoptada y que no piensa modificar. Demuestra con ello, que conceptos como diálogo o negociación en realidad le son ajenos.

ELA, debe quedar claro, ni participa, ni deja utilizar su sigla en simulacros, pero insta al Departamento a que reconsidere su actitud, y abra un período real de análisis, consulta y negociación con todos los sectores implicados. Es lo mínimo que debe hacer con un tema de esta importancia.