ELA aumenta su afiliación en 2.000 personas desde el anterior Congreso (cifra total: 100.925)

Hay otros datos muy significativos de lo que representa ELA, siempre en lo referente a la afiliación: el porcentaje de mujeres en el conjunto del sindicato ha pasado en cuatro años del 43% al 46%, y dicho incremento se ha registrado principalmente en los sectores de servicios (donde el porcentaje de mujeres casi dobla al de hombres), precisamente los más precarizados. Este porcentaje de afiliación femenina aumenta casi hasta el 50% entre las personas menores de 39 años. Ello demuestra que ELA está muy presente en los centros de trabajo donde la labor sindical es más necesaria, allá donde las trabajadoras están más indefensas. Estos sectores son, en su mayoría, los declarados esenciales durante la pandemia de covid.
La afiliación es clave para entender la tarea sindical y la propia naturaleza de ELA, ya que esta fortaleza militante es lo que permite que el 93% de los ingresos anuales del sindicato provengan de los recursos propios. Este porcentaje se ha mantenido en los cuatro últimos años. “100.925 trabajadoras y trabajadores, mediante su compromiso individual, hacen posible uno de los mayores proyectos colectivos de este país -destacó Mitxel Lakuntza-. En ese compromiso reside la fortaleza de ELA, la afiliación nos otorga una autonomía que nos permite situar siempre y en cualquier situación, la prioridad de los intereses de la clase trabajadora.”
En este sentido, ELA ha hecho también un balance de su situación económica, donde hay que destacar la fortaleza de la caja de resistencia, herramienta que abona a las personas en huelga una indemnización mensual de 1.163 euros (en conflictos considerados ordinarios). Ello explica la capacidad de ELA para defender las condiciones de trabajo, con la huelga como elemento básico para una negociación colectiva de confrontación y no de acompañamiento. En este sentido, cabe destacar que ELA ha aumentado esa indemnización mensual un 34% en los últimos cuatro años, muestra de la buena salud de la caja de resistencia, a la que se destina el 25% de la cuota de cada persona afiliada. “Sabemos que las huelgas no se ganan solamente con tener razón -recordó Lakuntza-, la capacidad de de perseverar es clave. La caja es la ayuda, el respaldo y el ánimo que el resto de la afiliación traslada a las personas en huelga. Es un acto de solidaridad incomparable”.
El porcentaje de mujeres en la afiliación pasa del 43% al 46% desde 2017, incremento registrado sobre todo en servicios y en los sectores más precarizados
ELA ha aumentado la indemnización por caja de resistencia un 34% en 4 años (actualmente, 1.163 euros mensuales)