comercio textil de navarra
ELA denuncia a la CEN para forzarle a negociar el convenio

El convenio de comercio textil lleva paralizado desde el año 2009. La falta de una asociación patronal y la limitación de la ultraactividad de los convenios tras la reforma laboral del PP en 2012, hizo que ningún sindicato tomara la iniciativa de solicitar la constitución de la mesa de negociación ante el riesgo cierto de desaparición del convenio.
Tras la reforma laboral de 2022, en la que se recupera la ultraactividad de los convenios, ELA, que es el sindicato mayoritario en el sector, inició el procedimiento para negociar el convenio que se encontraba prorrogado para tratar de negociar un nuevo acuerdo que permitiese recuperar el poder adquisitivo perdido por los salarios y avanzar en derechos tras 13 años de paralización.
Hasta el momento ha sido imposible constituir formalmente la mesa de negociación a pesar de que desde el sindicato se han tenido multitud de reuniones con las diferentes empresas del sector para tratar de hacer realidad esa negociación. También ha habido interlocución con patronales de ámbito estatal en un intento de agotar las todas las vías posibles. Incluso desde ELA, en este caso conjuntamente con LAB, se convocaron tres jornadas de huelga a finales del año 2023.
Ante la falta de resultados, ELA convocó a la CEN, por ser la asociación empresarial más representativa, entendiendo que la legislación le faculta para ejercer de patronal subsidiaria en aquellos ámbitos en los que no existe patronal sectorial. Sin embargo, también la CEN se desentendió de esa responsabilidad y ni tan siquiera acudió a la reunión convocada por ELA.
ELA entiende que la CEN tiene la obligación de sentarse a negociar y por ello ha demandado a la patronal, de forma que se determine judicialmente esa obligación y pueda constituirse de una vez por todas una mesa de negociación.
Es lamentable, el hecho de tener que acudir a los juzgados para que la patronal tenga que reconocer la responsabilidad que le corresponde, y que se niega a asumir, mientras los salarios del convenio acumulan ya 16 años de congelación salarial y una pérdida de poder adquisitivo del 30,3%.
Los y las trabajadoras del sector de comercio textil se merecen tener un convenio en Navarra. Y ELA va a agotar las vías para lograrlo.